Muy avergonzada. Así se siente la periodista Andrea González (28) luego de depositar $200 mil en una cuenta que no sabe a quien le pertenece. Ayer en la mañana, una de sus amigas más cercanas, le pidió por medio del chat de gmail que le transfiriera ese monto, ya que su marido aún no se conectaba y el sitio de su banco estaba caído. 'Me dijo 'hola gordita, ¿cómo estás?' y empezó a hablarme en el lenguaje que usamos siempre, así que no sospeché. Tengo mucha vergüenza porque se supone que uno está preparada para una estafa', contó a La Estrella.
Francisca Altamirano (30), la amiga a quien le hackearon la cuenta, dijo que al momento en que Andrea transfería el dinero ella iba en el metro. 'Justo me llamó otra amiga para preguntarme por qué necesitaba plata y me di cuenta', recordó tras hacer la denuncia en la Brigada Investigadora del Cibercrimen de la PDI.
La noche anterior, Francisca había recibido un mail supuestamente desde Gmail, donde le pedían verificar su número de teléfono, ya que éste había sido cambiado, pero al dirigirse al link, no le apareció nada en la pantalla. J