Caída de ciclista: Crudo relato de compañeras culpa a jueces
Estefanía Urzúa, quien competía junto a Irene Aravena, y Pamela Verdugo, recordaron la "terrible caída" de la chilena en los Odesur, por la que se tuvo que operar.
La tarde del miércoles estremeció a los Odesur Santiago 2014. La ciclista chilena, Irene Aravena, sufrió un grave accidente tras chocar con un partidor mientras disputaba la medalla de bronce en la prueba de velocidad por equipos.
El lamentable suceso la obligó a ser traslada de inmediato a un centro médico, donde fue operada esta madrugada quedando con una fractura expuesta, un dedo de su mano roto, un TEC cerrado y múltiples contusiones.
Y a menos de 24 horas del grave accidente sus compañeras nacionales Estefanía Urzúa y Pamela Verdugo relataron a Emol el duro momento que se vivió en el Velódromo de Peñalolén.
"Nunca sentimos una advertencia, ninguna señal de lo que podía pasar. Yo podría haberme corrido antes y tal vez esto no hubiese pasado, pero nunca nos percatamos de lo que pasaba", contó Urzúa que en ese momento estaba en competencia junto a Irene.
Y siguió recordando: "La vi que salió volando, quedé impactada, no podía creer lo que había pasado, estaba tirada en el suelo. El golpe que se dio fue tremendo contra el piso".
Al relato de Urzúa, su compañera Pamela Verdugo agrega más detalles. "Yo estaba viendo y no lo podía creer, pensé lo peor, el golpe fue demasiado fuerte. Es inexplicable que estas cosas pasen".
¿Quiénes son los responsables del accidente? Ambas corredoras chilenas coincidieron en que los jueces tienen una gran cuota de culpa y que esto se pudo haber evitado.
"Nunca sentimos ninguna advertencia, ni pistola ni gritos de algo raro, tampoco vimos que pasara algo fuera de lo normal, los jueves no dieron señales", explicó Verdugo.
Además, Urzúa añadió que "con la gente gritando, con nosotras concentradísimas, era imposible ver algo que perfectamente se pudo evitar, los jueces nos olvidaron y sólo se preocuparon de las brasileñas, de avisarles a ellas de la partida falsa".
Dos días lleva Natalia Riffo a cargo del Ministerio del Deporte y ya debió enfrentar su primer problema, tras el grave accidente que sufrió la ciclista nacional Irene Aravena este martes en el Velódromo de Peñalolén.
"Yo anoche (el miércoles) estuve con sus padres en la clínica Santa María, tenemos que revisar qué pasó ahí. Es lamentable, hemos conversado con la corporación Odesur, también quiero señalar que se cumplieron los protocolos que tiene relación con la organización y se dispuso de apoyo para los padres, que son de Curicó, pero hay que investigar más de fondo qué pasó ahí", expresó la secretaria de Estado.
Pese a la gravedad del accidente, la ministra aclaró que "sería apresurado hablar de despidos y pedir renuncias". J