A inicios de esta semana San Marcos entrenaba con plantel completo para el duelo ante Curicó Unido.

Los retornos a las prácticas de Joel Estay y Miguel Coronado habían marcado la jornada de día martes. Sin embargo, el mismo panorama no se pudo vislumbrar en los entrenamientos de ayer.

Y es que el lateral por derecha volvió a presentar molestias físicas y es duda para el compromiso de este sábado ante los torteros, a las 22 horas en el estadio Carlos Dittborn.

El ex Universidad de Chile tiene dolencias en uno de sus talones, por lo que no estaría para el compromiso de mañana.

Ante esto, Luis Marcoleta ratificaría a Augusto Barrios como lateral por derecha, sobre todo luego de su elevado desempeño ante Santiago Morning el pasado fin de semana.

Con la caída de la noche practicaron los del Morro en la jornada de ayer.

En la mañana fue el turno de los arqueros, como cada jueves, y los de Marcoleta se tomaron el Carlos Dittborn para ensayar en el horario que serán los próximos dos encuentros de local, ante Curicó y luego contra San Felipe. J

Luego del éxito que tuvieron las clases de beach training que llevaron a decenas de ariqueños hasta playa Chinchorro durante el verano, los instructores de la municipalidad decidieron continuar con los trabajos, aunque con un cambio en el horario.

Y es que a las clases de las siete de la mañana realizadas en enero y febrero llegaron en promedio cuarenta alumnos, algo más que positivo para un plan piloto que buscaba entregar un espacio para la actividad física durante la época de vacaciones.

Según explica el encargado del área de Deportes y Recreación de la municipalidad, Orestes Echarri, los ariqueños comienzan a adoptar una nueva cultura atlética, que los lleva a dedicar más tiempo al deporte durante sus ratos de ocio, ya sea bien temprano en la mañana o durante las tardes.

"Hay muchas personas que salen a correr en las mañanas por la playa Chinchorro y a ellos quisimos entregarles la posibilidad de poder realizar actividad física en compañía de instructores con amplios conocimientos y junto a la implementación necesaria".

El beach training permite a sus practicantes mejorar sobre todo la resistencia por medio de cortas sesiones de ejercicios de gran exigencia, los cuales se encargan de tonificar todas las partes del cuerpo.

En cuanto a la implementación, esta no es demasiado compleja. Un par de mancuernas, unas vallas y un neumático han permitido que los ariqueños trabajen y queden totalmente agotados luego de las sesiones.

Desde marzo las clases pasaron a un horario vespertino. Los alumnos se reúnen en playa Chinchorro junto al instructor Ricardo Medina a las 20 horas.

El cambio brusco de horario de las siete de la mañana a las 20 horas se debe a que en verano las vacaciones permitían a los ariqueños poder madrugar y dedicar la mañana al entrenamiento, algo que debido al trabajo y a los estudios se hace difícil en marzo.

Por esta razón, los deportistas aprovechan las últimas horas de sol del día para botar todo el estrés de la jornada a la vez que mejoran su estado físico.

Ante la pregunta si cualquier persona puede practicar beach training, Echarri indicó que los ejercicios se adaptan a la capacidad de cada practicante quien, a su vez, irá aumentando la exigencia conforme vaya mejorando su capacidad aeróbica. J