El presente de San Marcos no es el de los mejores. Los Bravos afrontan su peor momento en lo que va de temporada y el sueño del ascenso a la Primera División pareciera estar cada vez más lejano.

El cuadro del Santo lleva en siete fechas apenas un triunfo, ante Magallanes el 5 de enero pasado, y de ahí ya va un mes y medio desde que los del Morro no pueden abrazarse.

Los dirigidos de Luis Marcoleta tienen dos derrotas y tres empates (sumando el partido libre de la fecha anterior), lo que deja a los celestes con seis unidades en el Clausura y están undécimos en la tabla de ubicaciones.

San Marcos ha tenido que lidiar el problema de las lesiones y suspensiones de manera constante, lo que ha llevado a modificar el esquema en más de una oportunidad.

En total, para el encuentro ante Deportes La Serena eran seis los jugadores que no estuvieron. Patricio Gutiérrez tenía una fecha de suspensión, mientras que Eric Godoy, Daniel Mustafá, Miguel Coronado, Christopher Singer y Joel Estay presentaban molestias. Sólo a última hora logró ser titular Francisco Silva, quien el jueves era dura.

A este problema hay que sumarle el bajo rendimiento de los refuerzos de este semestre. Ni Gastón Álvarez ni Braulio Brizuela fueron determinantes, pese a que fueron de la partida, y Markinho no cambió la historia para los Bravos cuando ingresó.

"Mejor son los (jugadores) que están acá", comentaba tras el encuentro Carlos Ferry.

Por su parte, Marcoleta defiende su contratación, indicando que es cuestión de tiempo antes de ver el potencial de las nuevas alternativas. "Sigo apostando que en un par de partidos sigan mejorando. Espero que la apuesta resulta", expresó el estratega.J