Abandono de Villa Frontera
Desde un tiempo a la fecha los ciudadanos, habitantes de Villa Frontera, lugar tranquilo, acogedor y un punto con gran potencial turístico, nos sentimos como de segunda clase, por el abandono en el cual nos encontramos y el poco interés de las autoridades por mejorar un poquito la calidad de vida en este sector. No pedimos grandes ni costosas obras, sólo una mejor gestión de quienes deben y tienen la obligación para con los ciudadanos que confiaron en ellos cuando se postularon a cargos público.
¿Qué es lo que pedimos? Reparar las luminarias, que en un 60% a lo menos se encuentran con sus ampolletas quemadas (en las calles donde las hay) incluido el puente Chacalluta, que con solo limpiar los paneles solares, cumplirían con su función; fumigar el sector contra zancudos y mosquitos (antiguamente se hacía todos los años); pasar máquina moto niveladora por las calles de tierra y regarlas para que se endurezca y dure un poco más el trabajo (no pedimos pavimentación, para no ser tan ingenuos); se gestione el ingreso de Aguas del Altiplano para que abastezca de agua potable al sector, que hoy paga el agua más cara de Chile, creo por ley debería cubrir con su servicio toda las zona urbana de la ciudad (de la cual somos parte); mejorar la frecuencia de la movilización colectiva (así dejar el auto en casa y ahorrar el alto costo que significa su uso diario).
Esto es sola una muestra, pero por ahora, nuestra solicitud, modesta, pero de gran relevancia para nosotros, ¿es tan oneroso para el presupuesto municipal? Honestamente creo que no, tan sólo se necesita voluntad y buena gestión; también con poco dinero se puede mejorar la calidad de vida de las personas. Eliminemos la burocracia que sólo genera más corrupción.
Ni siquiera cuando llegué con mis padres a colonizar el sector (hace ya 45 años) en que no teníamos agua, luz ni caminos, nos sentimos tan abandonados por las autoridades como hoy.
Roberto Moreno Prades