Los departamentos Doña Elisa piden a gritos la reja perimetral
La seguridad del lugar ha sido afectada en innumerables ocasiones desde el año pasado.
Los vecinos del conjunto habitacional Doña Elisa ubicado en Linderos con Providencia están más que preocupados por la situación que los afecta.
Las más de 130 familias que viven en los edificios y que vienen del sector contaminado por polemizares esperan desde hace más de un año la instalación del cerco petimetra, algo que en los conjuntos de los alrededores se ha ido levantando mientras ellos miran con impotencia.
Y es que las mallas de gallinero y los palos levantados no son suficientes para impedir que por las noches la delincuencia entre al condominio y robe en los autos. Incluso es común encontrar cada mañana latas de cerveza botadas por todo el lugar, pertenecientes a jóvenes que vienen de otros sectores a beber y a causar alboroto a una comunidad conformada en su mayoría por gente de la tercera edad y por niños.
La antigua dirigenta vecinal, Gladys Ramírez, indicó que el tema no da para más puesto que la seguridad de los habitantes está en peligro cada noche que pasa sin que se levanten las rejas perimetrales que otros condominios ya tienen.
"Me da mucha pena porque vivimos con todos los alrededores llenos de basura. Estas familias son en su mayoría adultos mayores. A nosotros se nos prometió hace más de un año una reja decente, pero las autoridades nos han abandonado, cerrando contornos de otros lugares menos nosotros".
En 2012 se levantó el conjunto habitacional y hasta la fecha las rejas perimetrales no han sido construidas. J