Un eterno dolor de cabeza, sumado a otro terrible de oídos fue lo que motivó a la mamá de una estudiante de 10 años a llevar a su hija hasta un otorrino laringólogo. Pero si hasta ahí el asunto era preocupante para la mujer y su familia, más lo fue cuando el especialista la derivó al neurólogo y este último a una sicóloga, quien argumentó que el asunto iba más allá del malestar cotidiano de una alumna de quinto básico.

Sucede que tras un par de visitas de la menor al Programa de Salud Mental del cesfam Iris Véliz, el diagnóstico arrojó "daño sicológico manifestado por alteraciones del sueño y de ánimo, falta de apetito, aumento de sonambulismo, desesperanza, desmotivación, tristeza recurrente, bruxismo y temor a sus pares y al colegio". Todo originado por "bullying sufrido en el establecimiento, caracterizado por burlas, hostigamiento y aislamiento social", según el propio informe del consultorio.

Fue sólo ahí que la estudiante del Colegio Cardenal Samoré reveló el tipo de acoso que sufría en su curso, sobre todo de parte de una compañera, lo que hizo reaccionar a sus padres. "Nunca nos dijo nada directamente, aunque notamos un cambio de personalidad", aclaran de entrada.

"Ya cuando supimos, tuvimos que cambiar todo el sistema de vida familiar. O sea que durmiera en nuestra pieza y más encime con medicamentos hasta el Diazepam de 5 mg".

- Sí; lloraba, le daba miedo ir al colegio y hasta en los últimos meses se volvió el doble de sonámbula. Ella padecía de este trastorno, pero nunca lo evidenció tanto. Por ejemplo el llenar la cama de silicona, tijeretearse el pelo o hasta cortarle la cola a un perrito que la sicóloga nos recomendó comprarle y al que al día siguiente, cuando vio cómo quedó, se puso a llorar sin pensar que era ella quien lo había hecho.

- Hace un par de meses le rayaron los cuadernos con cosas bien fuertes, casi irreproducibles. Ahora el episodio del diccionario ocurrió el último día que fue a clases. Se le quedó el diccionario y una amiga se lo trajo, advirtiéndole que se lo habían rayado con un 'muérete' y otras palabras. Por lo mismo el lunes ya estampamos la denuncia en la PDI, la que pasó a manos de la Fiscalía.

Desde el colegio en cuestión emitieron que ya hay una investigación del caso, tanto así que "ya estamos al tanto en el área de sicología y en el de orientación del establecimiento, para ver si existe algún tipo de anomalía".

Para Leyla Daher, profesional de Atención de Denuncias de la Superintendencia de Educación, cualquier caso del que se sospeche de algún tipo de violencia hacia un alumno se puede canalizar ya sea personalmente en la propia Superintendencia de Educación (Sotomayor 541), en el banner de denuncias de www.supereduc.cl o bien en la página de Gobierno, en el link contáctese con el Presidente.

Agrega que más que el término bullying, "como Superintendencia lo llamamos violencia escolar, y no sólo se refiere entre alumnos, sino que de profesor a alumno o hasta apoderado a profesor", deja en claro.J

l En el hospital regional, aunque sin riesgo vital, terminó ayer un motorista de unos 40 años quien resultó herido tras protagonizar un accidente de tránsito que también involucró a un automóvil en plena costanera sur de la ciudad.

Según Carabineros, el hecho ocurrió a las 14.30 horas, específicamente frente al estacionamiento de camiones portuarios, cuando ambos vehículos realizaban un viraje cerca del bandejón central, momentos en que se produjo el impacto que además dejó con un abollón al Hyundai Excel y en el suelo al motorista. J