Una verdadera pesadilla vivió una mujer ariqueña al interior de su domicilio, ubicada en el pasaje 7 de la Población Flor del Inca: Fue amenazada de muerte y en todo momento estuvo intimidada con un cuchillo en el cuello.
La historia de esta mujer de iniciales J.R.L se inició a las 2 de la madrugada de ayer, cuando sintió que alguien ingresó a su casa saltando el muro colindante con su vecino. Al salir se dio cuenta que era su ex pareja, de iniciales E.N.C de 21 años. El sujeto se dirigió corriendo hacia la cocina y tomó un cuchillo. Fuera de sí, le dijo: "Te voy a matar". Luego tomó a la mujer por la espalda y le colocó el arma en el cuello. No conforme con dicha acción, según relató, el hombre la arrastró hasta el dormitorio y le señaló: "despídete de tu hijo, porque te voy a matar". Fue en ese entonces que el hombre perdió el control y empezó a propinarle varios cortes en cuerpo.
El fiscal de turno Francisco Ganga, expuso ante el tribunal que la víctima como autodefensa empezó a forcejar con el imputado, pero éste habría intentado enterrarle el cuchillo en la región torácica (corazón), la habría lanzado a la cama y la habría agredido con el arma. Luego la tomó de nuevo, la arrastró hasta el living y la obligó a sacar una botella de alcohol. Fue en ese momento que los padres de la víctima sintieron ruidos y llamaron de inmediato a Carabineros.
Los policías llegaron al lugar y vieron a la mujer con heridas cortantes en su cuerpo y procedieron de inmediato a detener al sujeto.
En la audiencia de control de detención, el imputado fue formalizado por dos delitos: femicidio de grado tentativa y desacato.
El persecutor solicitó la cautelar de prisión preventiva con el argumento que el sujeto constituye un peligro para la seguridad de la víctima, ya que el domingo 1 de noviembre fue formalizado por el delito de lesiones menos graves en el contexto de Violencia Intrafamiliar y el Tribunal decretó la cautelar de prohibición de acercarse a la víctima y a su domicilio.
Si bien la defensa a cargo de Rolando Jara, se opuso a dicha cautelar señalando que su representado no tuvo la intención de matar a su ex pareja, la magistrada Sara Pizarro no compartió dicha tesis y decretó la prisión preventiva. Se fijo un plazo de investigación de 50 días. J