Neblina, precipitaciones y frío. Ese fue el panorama durante la jornada de ayer. Y problemente la situación se repita hoy, pues la Dirección Meteorológica de Chile pronosticó chubascos intermitentes para la jornada de hoy, además de chubascos de nieve en la cordillera.
Desde la Onemi informaron que la situación se mantuvo controlada y que no se registraron damnificados debido a las precipitaciones, a pesar de que se contaba con un stock en caso de ser necesario.
Franz Schmauck, director regional de la Onemi, señaló que el fenómeno se produjo en la zona de la costa y los valles.
"No hemos registrado afectados, y se entregaron muy pocos plásticos para las techumbres, aunque todos fueron preventivos", declaró.
"Comenzó cerca de las 06.00 horas, pero ya a mediodía se había detenido en algunos sectores de la ciudad", comentó.
La situación se registró en el norte grande. A pesar que nuestra ciudad funcionó con relativa normalidad, a excepción de los cortes de luz que se provocaron en las poblaciones más antiguas, debido a los empalmes eléctricos que no han sido renovados, según se informó desde Emelari.
"En las regiones de Tarapacá y Antofagasta fue más intenso. El camino hacia San Pedro fue cortado por el clima", explicó Schmauck.
Los ariqueños, por otra parte, recibieron la llovizna con serenidad, pues mucho declararon continuar con sus rutinas sin mayores inconvenientes.
Martín Bobadilla, junto a sus amigos,se mostró contento.
"A mi me gusta que llueva, porque nunca cae agua. Pudimos jugar fútbol igual, porque como eran gotas chiquititas no molestaban tanto, así que seguimos", comentó el pequeño.
Érika Montero también se encontraba tranquila. "Yo arriendo y el techo tiene una losa, así que no me mojé. Falta un poco de techo en una parte, pero es tan poco que no me pasó nada", comentó.
María Angélica, de Santiago, y Marcus, de Munich, fueron sorprendidos por la lluvia durante sus vacaciones.
"Allá en Santiago estamos muy acostumbrados a la lluvia, para mi es normal. Pero había venido otras veces a Arica y siempre estaba muy soleado, asi que es raro", explicó la joven.
Marcus, proveniente de Alemania, en un claro español expresó su opinión. "Me dijeron que era un desierto, pero está lloviendo.Espero poder ver el desierto después", comentó sonriendo.
Carlos Valdivia tuvo otra visión del fenómeno. "Que ahora llueva cada vez más en Arica es normal. Por una parte es bonito, pero hay muchas casas que no están preparadas para el agua, así que no sé si sea tan bueno al final", expresó.
Para Raúl Vargas, repartidor, el fenómeno no pasó desapercibido. "No creo que la gente salga mucho, pero es interesante, porque acá no se ve mucho. Nunca había pasado un sábado en la mañana, y llama la atención de la gente", opinó.
Fausto Villegas, quien lleva 40 años en la ciudad, le restó importancia. "esto no es lluvia, es una garúa, pero no es tanto como dicen. No alcanza a ser lluvia", recalcó.
Ni el frío ni los chubascos impidieron que una veintena de jóvenes se reunieran a un costado de la rotonda Tucapel con pancartas, silbatos y panderos."El frio da lo mismo cuando es una manifestación", aseguró Maureen, protestando contra la termoeléctrica, la semillera, la minera "Los Pumas y los derechos de los ariqueños.