La dramática escena daba cuenta de un joven de 21 años tirado sobre la cuneta, otro de 28 intentando ser estabilizado, una mujer de 45 preguntando cómo estaban sus hijas de 2 y 11 años, y un nochero del sector clamando por ayuda.
Así fueron los primeros minutos después del accidente automovilístico registrado la noche del miércoles en la costanera sur de Arica, casi detrás del Campus Velásquez de la UTA, que dejó a tres heridos de consideración y uno en estado grave. El joven de 21 resultó ileso.
A las 21.20 horas, un automóvil deportivo que transitaba por avenida Chile con dirección al norte impactó la parte delantera de un Mitsubishi Delica que esperaba el signo Pare para virar hacia Juan Antonio Ríos. Bastó ese golpe para que el primer vehículo terminara en el otro lado de la calzada y para que el 4x4 volcara, lo que aumentó más el drama.
Producto del accidente, las dos menores de 2 y 11 años terminaron con heridas en su cabeza y extremidades, mientras que la mujer de 45 resultó con un corte en su cuero cabelludo y un golpe en la frente.
En todo caso el que resultó peor fue uno de los ocupantes del automóvil deportivo, identificado como Mario Antonio Landreros Loyola (28), quien terminó grave, por una fractura en su cuello, por lo que se mantiene internado en el hospital local, hasta donde fue trasladado gracias a paramédicos del Samu y Carabineros de la Primera Comisaría, quienes además suspendieron el flujo vehicular hasta el retiro de los móviles.
"Sentí el puro impacto. En realidad como por acá pasan hartos autos, uno piensa que puede ser cualquier cosa, pero cuando llegué y vi que había un furgón volcado intenté llamar altiro a una ambulancia, porque vi a una mujer que lloraba por sus hijos. Estaba ensangrentada entera, pero lo único que quería era ver a sus hijos", declaró el nochero que se convirtió en el primero en llegar a la escena del accidente.