Los perdonazos no ocurren todos los días. La condonación de intereses y multas por deudas tributarias es un total acierto del Gobierno, sobre todo en el ambiente de crisis económica mundial en el que estamos insertos.
Con la iniciativa, más de 700 mil contribuyentes que se verán beneficiados, de los cuales un 20% son adultos mayores de 65 años, personas que realmente necesitan una ayuda. Este patrocinio no solo ayudará en particular a quienes no pueden pagar, sino que otorgará mayor liquidez y entregará mayor recaudación al Estado, lo que permitirá dinamizar la economía para todos por igual.
Y aunque, hay que felicitar a quienes mantienen sus pagos al día, es entendible que este tipo de medidas se otorgue en situaciones fortuitas porque, sin duda, favorecerá el bolsillo de todos los chilenos.
Mucho Facebook, poca calle
Una de las cosas que me gusta en demasía es leer, creo que a todo el mundo le interesa saber, el amor superior como le decía Platón. Pero de vez en cuando, analizo sobre la calle, ese papel de concreto que pide de nuestro barro en los zapatos como tinta y de nuestros pies como la mejor pluma para salir a escribir la historia. ¿Cuál historia? Esta, el ser-ahí, la realidad concreta de nuestro presente, pues la teoría es importante pero solo como herramienta, y solo es útil cuando la usamos para construir nuestro conocimiento aplicándola a la realidad.
Dicho esto, solo pregunto ¿por qué en Arica hay más de 10 mil seguidores en "No+Afp" y en las calles no se llega ni a mil? ¿por qué en las calles no se llega ni tan solo a quinientas personas, incluso en algunos casos ni ha cien en protestas de corte social?
Tal vez, no somos la generación de los 60' en donde se marchaba y se hacían ollas comunes como lo anhela aún el partido comunista, tal vez, tampoco somos esa vieja clase trabajadora emergente de los 70' que negociaba con grandes centros de sindicatos y vestido de overol. Pero seguimos siendo obreros, y nuestro trabajo sigue siendo más allá de la hora jornal. Solo reflexionen sobre el trabajo que hacemos vía mail fuera de horario, o ese envíos de documentos mientras estamos en el colectivo, mientras pensamos que somos modernos. ¡Señores! seguimos siendo técnicos, los ingenieros están en Europa.
Tamara Hube Escare
Pablo González Mollo