Rescatar vidas del mar es su vocación
Juan Rojas lleva 21 años como salvavidas, y desde entonces ha entregado su vida a la labor de resguardar el bienestar de quienes se enfrenten a los peligros del mar.
Desde los inicios de su vida, Juan Rojas era testigo de cómo muchos morían por ir a recoger machas a la playa, hechos que lo motivaron a querer proteger las vidas de bañistas de la zona.
Desde joven, Juan sintió una cercanía con el mar, por lo que buscaba instancias para estar cerca de él, esto lo llevó a convertirse en jugador de waterpolo durante su adolescencia, llegando incluso a jugar con la selección nacional.
Posteriormente, trabajó un tiempo en las minas, pero él sabía que no estaba destinado a hacerlo por mucho tiempo. "No era lo mío, mi nexo era con el mar", comentó el salvavidas.Al quedar sin trabajo, y gracias a conocidos comenzó a sumergirse en salvar vidas.
"En ese tiempo, nadie te enseñaba nada, con saber nadar y saber rescatar bastaba". Además, mencionó los pocos recursos que poseían en ese entonces. Sin embargo, la realidad de un salvavidas en Arica ha cambiado, pero aún persisten algunos pensamientos. "Nunca le tomaron el peso a los salvavidas, y actualmente hay gente que no valora nuestro trabajo", agregó.
Actualmente, hay 24 salvavidas en todo Arica, y no hay cursos que estén preparando a nuevos rescatistas. "Es una raza casi extinta", agregó. Con respecto a lo mismo, Juan afirmó que sólo hay una mujer en la zona que se desempeña como salvavidas.
"Siempre me he inclinado a que las mujeres se involucren en este trabajo. No me gusta que el campo se vea machista por este hecho", recalcó.
Milagros y tragedias
A lo largo de su carrera, Juan ha sido testigo de hechos que lo han marcado. El primero fue el rescate de una mujer con 8 meses de embarazo a punto de ahogarse, cuya condición no notaron hasta que tuvieron que sacarla del agua, hecho que terminó con un final feliz.
Por otra parte, un hecho triste que marcó su carrera fue el imposible rescate a un niño que se perdió en la playa Las Machas. "Lo que más me marcó fue el niño que nunca encontramos, si hubiese estado vivo habría cumplido como 25 años, el mar nunca lo devolvió. Estuvimos buscándolo por un mes, y todos los días teníamos que llevarle alguna novedad a la madre", comentó.
Cultura acuática
Por el momento, el salvavidas fomenta la capacitación para que más personas puedan llegar a convertirse en salvavidas; en este caso, los más pequeños.
Juan Rojas es director y asesor de la Fundación Aguas Más Seguras, la que tiene como objetivo principal que no haya más gente que muera ahogada en Chile. "Además, queremos crear una cultura acuática, porque no la tenemos", aseguró.
De acuerdo a Juan, por primera vez en Arica se está preparando a niños salvavidas, con conocimientos en primeros auxilios y números de emergencia. La estudiante más pequeña tiene 5 años.
El experto destacó que por muchos años buscaron crear esta iniciativa, ya que "como salvavidas, creo que debemos educar a los niños, porque ellos son quienes educan a los padres", comentó.
"Hay que seguir capacitando gente. Hasta el día que yo me muera voy a seguir haciendo este trabajo porque lo amo", agregó el salvavidas.