Niños conocieron fauna local en cuevas y humedal
Visitas fueron organizadas por el Proyecto Explora. Los pequeños participaron de charlas y paseos junto a sus padres.
El lagarto corredor de cuatro bandas, mide aproximadamente 20 centímetros y se pasea como dueño de casa por las cuevas de Anzota. Su coloración es variable pero suelen observarse cuatro bandas de distintos colores en el cuerpo, de las cuales proviene su nombre. Corren rápido y cada cierto trecho adquieren una posición erguida con la cola curvada.
Esta fue una de las atracciones que pudieron disfrutar un grupo de niños acompañados por sus padres y que visitaron las cuevas de Anzota como parte de las actividades de verano organizadas por el proyecto Explora que ejecuta la Universidad de Tarapacá.
El paseo incluyó el caminar por el circuito habilitado, con breves detenciones para admirar la fauna del sector, como el lagarto corredor de cuatro bandas, los chungungos y las aves marinas. También pudieron ver las formaciones rocosas y las zonas de acumulación de abono orgánico.
Gabriela Álvarez, una de las participantes, manifestó que lo que más le gustó de esta actividad en terreno fue "conocer la gaviota Franklin y un ave rosada parecida a un flamenco".
Por su parte, la profesora de Educación Básica, Ingue Acuña, manifestó que "estas instancias permiten que las familias se puedan educar, aprender de cultura, arte y ciencia y así promover esta forma de educación".
También al humedal
Pero las cuevas no fueron el único lugar que recorrieron los niños participantes del proyecto veraniego de Explora. También realizaron una visita al humedal del Río Lluta, donde admiraron el patrimonio natural, la biodiversidad, la cadena trófica y conocieron los senderos habilitados para explorar este Santuario de la Naturaleza,único en la zona norte del país.
Fue así como el grupo recorrió la laguna norte y la laguna sur, siempre guiados por los caminos habilitados para ello, y pudieron conocer la convivencia de las distintas especies en un mismo espacio.
Como en la visita guiada participaron además, padres conocedores de la biología de algunos animales, fueron un gran complemento en las conversaciones sostenidas en el grupo.
"Los padres estuvieron muy comprometidos con la educación de sus niños y ellos a su vez, muy abiertos a recibir la información", comentó Farah López, una de las guías que participó en la actividad de Explora.
López agregó que las visitas incluyeron la entrega de material educativo para los niños y sus apoderados, en el que se describen los elementos más importantes de la biodiversidad costera, tanto de cuevas de Anzota, como del humedal y en el que aparece, por supuesto, el lagarto corredor de cuatro bandas.
"En este material hay información de la flora y fauna ariqueña para que los niños puedan seguir aprendiendo", acotó.