Dar la mano, tomar una tarjeta de presentación o agarrar una fruta, son algunas de las cosas que una persona que no tiene una de sus manos, podrá hacer con "Éfira", la primera prótesis robótica en Chile, creada por la Fundación Prótesis 3D.

Daniela Retamales, fundadora y directora de la organización que nació en Valparaíso, explica que la prótesis "Éfira" busca mejorar la calidad de vida de las personas que no tienen sus extremidades superiores. "Nosotros partimos haciendo una buena encuesta con nuestros beneficiarios, porque siempre es necesario hacer un diagnóstico participativo. Con esta investigación, sacamos este primer modelo que tiene como objetivo la reinserción laboral y mantener un desarrollo tecnológico continuo ", dice.

El primer beneficiado con esta prótesis es Sebastián Illanes, un trabajador que le comentó a la fundación la necesidad de generar una prótesis que fuera más eficiente a la que usaba.

"A diferencia de la prótesis convencional de gancho, que me permitía funcionalidades más limitadas, con 'Éfira' puedo hacer movimientos detallados y tomar objetos, como una tarjeta o un mouse, de forma más firme y fina. Para eso se tenía que crear una prótesis que fuera robótica. Esto es mucho más sencillo, porque funciona con la contracción muscular, que hace que esta prótesis se pueda mover con más simplicidad y que pueda ser mucho más funcional", manifiesta.

Estética y autoestima

La prótesis, que tardó dos años en crearse porque se trata de un trabajo 100% voluntario, es para personas que perdieron completamente una mano, pero que tienen una parte del antebrazo. Daniela Retamales detalla que se coloca un sensor en el bíceps. "Cuando el músculo se contrae, se genera el movimiento", acota.

Si bien "Éfira" intenta que la persona pueda llevar una vida completamente normal, otro de los aspectos que resalta, es la estética. "Pasa mucho que se genera una exclusión a las personas con discapacidad, o que se les mira en menos. Esta prótesis viene justamente a romper un poco la barrera y que las preguntas no lleguen desde el 'pobrecito, le falta una mano', sino que del 'oye, qué bacán, mira la prótesis robótica que tiene'. Pasa a ser un Iron Man o Robocop para los más viejos y las personas vuelven a sentir confianza para salir a la calle", explica Retamales.

La prótesis "Éfira" por el momento está en marcha blanca, pero pronto estará disponible para los que la requieran. La directora de la fundación comenta que en este momento Sebastián Illanes la está usando para chequear los últimos detalles antes de lanzarla al mercado.

"La fundación trabaja con dos áreas: la de la prótesis mecánicas que se donan de forma gratuita a las personas en situación de discapacidad y las de las otras prótesis que, en un primer instante, se van a tener en marcha blanca. Se van a vender a precio de costo cuando se terminen las últimas validaciones", detalla.

El proyecto es financiado por Corfo y apoyado por Gen-E, Incubadora Social PUCV. La Fundación Prótesis 3D es una organización que busca mejorar la calidad de vida e inclusión social, educativa y laboral de personas en situación de discapacidad, a través de la entrega de prótesis funcionales y personalizadas fabricadas con impresoras 3D.

"En la Fundación queremos que nuestro trabajo no sólo consista en entregar prótesis, sino que también se genere un cambio real en las personas", cerró Daniela Retamales.