A un mes de su habilitación ya van cuatro salvatajes en El Laucho
Concesionario llamó a la responsabilidad de los bañistas, respetando las medidas de seguridad.
A un mes de la habilitación de la playa El Laucho, salvavidas de la Corporación Municipal Costa Chinchorro, concesionaria del balneario, han realizado cuatro rescates mayores, uno de ellos con compromiso de conciencia y cerca de 20 apoyos en salvatajes menores.
Así lo dio a conocer Ayú San Martín, director ejecutivo de la entidad, quien agregó que en Navidad hubo dos rescates mayores, de un hombre de 21 años y una mujer de 23. Y durante la semana pasada se rescató a un joven de 21 y a una persona de tercera edad, quien sufrió una descompensación en el agua.
"Una vez realizados los rescates se estabilizó a los afectados y se monitoreó para luego ser derivados a los equipos de emergencia establecidos por el protocolo", comentó.
Dadas las circunstancias y debido a que en enero aumenta notablemente el flujo de visitantes al balneario, San Martín anunció que se reforzará el equipo de salvavidas. "Hemos podido definir los requerimientos de mejora, en este caso, se ha determinado que vamos a reforzar con un salvavidas más por turno", indicó.
Por otra parte, comentó que para optimizar el servicio y seguridad que se ofrece a los bañistas, el Instituto de Seguridad Laboral capacitó en primeros auxilios a los controles de acceso que trabajan en la playa.
El director destacó que El Laucho cuenta con un aforo aproximado de 7.000 personas y hasta la fecha se ha contado con la visita promedio de 3.500 personas diarias, cifra que se estima irá en aumento conforme avanza el verano.
Recomendaciones
Desde Costa Chinchorro recomendaron a los bañistas cumplir con las medidas de seguridad establecidas por la autoridad marítima. "Entre ellas no beber alcohol antes de ingresar al mar, no traspasar las boyas de seguridad, bañarse en lugares habilitados y no dejar a los niños jugando solos en el mar".
Otro factor importante a considerar es que desde las zonas de rocas de El Laucho, que están fuera de la zona de seguridad, hay personas que acostumbran a lanzarse clavados, exponiéndose al oleaje que se forma en la zona.