Deborah Moreno
La realidad futurista, apocalíptica y desoladora se refleja en el estreno de Fallout 76, videojuego que profundiza en la historia del Refugio 76, después de 25 años de la destrucción nuclear. La finalidad es hallar un refugio y las misiones se desarrollan en un mundo abierto, en seis regiones distintas de Virginia Occidental, en Estados Unidos.
En esta versión, una de las novedades es que los jugadores pueden ver a personajes controlados por otros: el multijugador. Igualmente, las misiones pueden ser en solitario o en grupo.
El videojuego posee conexión online permanente, de esta forma los personajes compartirán algunas funciones como mapas. Llegado al nivel cinco se activan tres tipos de interacciones que se podrá tener con otros personajes humanos con los que se comparte mundo: formar grupos, desconfiar o ser hostiles. La característica de multijugador es lo que ha recibido más críticas.
A pesar de ser uno de los estrenos más esperados de 2018, los recientes comentarios no son favorables. Ana Guajardo, editora de la web fanvina.com, mencionó que el juego no está logrando su objetivo: "No me ha motivado para nada. No está llegando a las expectativas que esperábamos".
A quien no le molesta tanto es a Karin Öettinger, conocida como LadyKarin, ya que destacó el espacio en el que se desarrolla Fallout 76 y sus nuevas funciones: "Su nuevo mundo abierto en multiplayer nos permite crear alianzas o partys con amigos para completar distintas misiones". Además, los enemigos están clasificados por nivel, que es lo que realmente irá modificando la hoja de ruta. La supervivencia pareciera ser más realista, hay necesidades como hambre y sed. Para superarlo, los personajes deben recolectar su comida y, en caso de no lograrlo, pueden contraer enfermedades. Además se agrega una segunda unidad económica llamada Átomos, que se obtiene principalmente completando desafíos que se pueden canjear para construir refugios.