La principal razón de quienes viven en estos terrenos es el alto costo de los arriendos Campamentos: una larga guerra que Arica todavía no gana
Son seis y albergan a unas 340 familias, según cifras oficiales. Sin embargo, el último catastro tiene siete años.
Y essenia Huallipe y su esposo querían salir adelante para darle una mejor vida a sus dos hijos y para ello instalaron un pequeño almacén en la casa que arrendaban. Pero la situación cambió cuando la vivienda pasó a otras manos y los nuevos dueños le subieron al doble el arriendo, dado que tenía uso comercial y habitacional. "No me iba muy bien tampoco en el negocio y de repente que me lo subieran de 150 mil a 300 mil pesos, fue mucho. No podía pagar esa cantidad así que por eso llegamos a vivir acá", relata.
Ese acá es el campamento Esperanza 2001, que nació hace 17 años, cuando llegaron las primeras familias al terreno que se encuentra entre Tambo Quemado y El Pedregal.
Tal como en el caso de Yessenia, la mayor parte de los habitantes del sector declaran haber llegado allí obligados por los altos precios de los arriendos. Rosa Núñez cuenta que cuando arrendaba, la renta mensual era de 250 mil pesos, gasto que le complicaba y por eso junto a su familia optaron por instalarse en "Esperanza 2001".
Ahora ella es la presidenta del Comité de Allegados del sector y detalló que en este asentamiento hay 42 familias y se estima que son más de un centenar los vecinos que hacen vida en dicho lugar.
"Este campamento es casi el más antiguo de Arica. Anteriormente enviamos una carta a la Presidenta Bachelet y hemos hablado con el seremi de Vivienda, quien nos dijo que debemos esperar, ya que no hay terrenos disponibles. Esta situación nos perjudica, ya que vivimos en el lecho del río, donde hay ratones, delincuencia y droga".
La dirigenta cuenta que sus tres hijos muchas veces deben estudiar a oscuras, ya que no tienen luz y el agua la deben comprar, pues el camión aljibe de la municipalidad que les lleva agua semanalmente sólo les deja a algunas familias.
"En primer lugar, creo que el agua es algo que no se le niega a nadie. Debemos gastar mucho dinero comprando bidones. Tenemos el registro social, pero se entrega por seis meses el beneficio y luego no. Además, a las pocas personas que se les entrega no les alcanza, entonces también deben comprar. Con la energía eléctrica hemos ido a hablar a Emelari para que nos instalen una conexión y cómo no hemos tenido solución de eso, han obligado a las personas a colgarse", explica.
Desde el municipio cuentan que los interesados en recibir agua potable deben entregar sus datos en la Oficina de Acción Social de la Dirección de Desarrollo Comunitario (Dideco), "con su registro social de hogares en la mano y acreditar la dirección de su domicilio. Luego personal de la Dideco visita el domicilio del solicitante, para recabar información relacionada con la solicitud.
Posterior a esto, la Oficina de Acción Social, elabora un informe que es enviado a la Dirección Municipal de Aseo y Ornato (Dimao) para que la dirección municipal proceda a la entrega del vital líquido".
Y si se trata de luz, CGE (Emelari) informó que a nivel nacional han participado en iniciativas de regularización de campamentos que han impulsado Municipios y Gobiernos Regionales en diferentes puntos del país. "Paralelamente CGE realiza gestiones para mitigar las conexiones irregulares que afectan la calidad del servicio eléctrico que reciben nuestros clientes", puntualizaron.
El más grande
Coraceros es el campamento más grande de Arica. A fines del 2009 llegaron los primeros habitantes a este lugar y de acuerdo a notas de prensa de la época el número de familias aumentó rápidamente llegando a las 150.
Desde el Serviu informaron que están próximos al cierre de este asentamiento y que se trasladará a las 125 familias que viven en el lugar al conjunto habitacional Vista Mar, emplazado en Cerro La Cruz. Agregaron que luego del traslado se concretará el cierre técnico de todo el lugar que era ocupado por las viviendas.
Gregoria Cabezas, presidenta del proyecto Vista Mar, vive en Coraceros hace 11 años y dice que "estamos felices, ya que nuestros departamentos se están construyendo. La mayoría de los que llegamos acá es debido a los altos costos de arriendo. Estamos esperando el día que nos entreguen nuestros departamentos con ansias".
En Coraceros actualmente siguen llegando habitantes, en su mayoría extranjeros y personas en situación de calle, que no están integradas en comités de vivienda.
Consultado Serviu por esta situación dijeron que "el tratamiento de campamento corresponde a una política específica del registro de familias de campamentos. Esta información se levantó en el mismo ejercicio del catastro 2011.
Las familias no incluidas en el 'Registro de Familias' deben postular a través de la vía regular o solicitar atención en otras instituciones, como por ejemplo la Municipalidad".
Destacaron que "las familias incluidas en el Registro de Campamentos, deben cumplir requisitos de postulación los que son ineludibles para la búsqueda de una solución habitacional y que no difieren de la oferta regular de Serviu. Esto incluye también a extranjeros que cuenten con su RUT y hayan seguido el procedimiento habitual para la postulación de una vivienda y elimina automáticamente a quienes ya posean una casa entregada por el Gobierno. Respondieron además que se encuentran trabajando en una actualización del catastro de campamentos "a través de un trabajo serio y metodológicamente probado para establecer la realidad de los campamentos a nivel nacional".
Cifras oficiales
De acuerdo a las cifras oficiales de Serviu basadas en último catastro vigente a la fecha, del año 2011, se verificó en esa época la existencia de 6 campamentos en Arica; Remolinos de la Esperanza, Cerro Sombrero, Renacer del Pedregal, San Miguel de Azapa, Areneros II y Coraceros, los que, según el Servicio de Vivienda y Urbanismo, habrían sido abordados por el Minvu a través del Programa de Asentamientos Precarios y Campamentos.
A pesar de que este servicio considera que Coraceros es el último campamento en la región, a la fecha y de acuerdo a informes de la Municipalidad de Arica y de la Cámara Chilena de la Construcción, siguen existiendo en Arica seis campamentos: Villa Frontera, Esperanza 2001, Bajo el Pedregal, Coraceros, San Martín y Oasis del Desierto.
Esto representa un 1.1% del país (y 0.7% de las familias). En base a los indicadores que tiene la Municipalidad de Arica, un total de 340 familias viven dentro de estos asentamientos en la comuna.