El problema del mal estado del pavimento en Arica llegó a un punto en que se comienzan a levantar iniciativas que van más allá de lo que hacen, o deberían hacer los organismos encargados de velar porque el panorama de nuestras calles sea distinto.

A las denuncias ciudadanas que son constatadas por "La Estrella de Arica", ahora se suma una iniciativa que puso en marcha el diputado Vlado Mirosevic, quien lanzó una campaña que busca denunciar y hacer un seguimiento a los molestos "eventos" de las calles y buscar el financiamiento necesario para que estos se logren solucionar.

"La ruta del hoyo" se llama esta campaña de orientación ciudadana. A través de las redes sociales, se buscará conocer dónde están los hoyos en la ciudad, mediante las denuncias de los vecinos. Con estos datos, el objetivo será identificarlos para buscar así la respectiva reparación.

Este tipo de iniciativas da cuenta de los esfuerzos que se realizan desde diversos sectores de la comunidad para poder solucionar este problema tan presente. Debido al enorme parque automotor que registra Arica, es muy lógico pensar en la sensibilidad que existe respecto al mal estado de algunas vías y cómo muchas de las calles comienzan a ser reconocidas como vías llenas de imperfecciones.

Lo mismo hace que la comunidad identifique cuando las autoridades, organismos, servicios y empresas responsables del estado del pavimento, hacen poco o nada para que estas deficiencias se solucionen. De hecho, "La Estrella" es otro de los canales en los que constantemente la comunidad da a conocer estos problemas.

Este hecho ha llevado a que el tema sea frecuentemente abordado a través de secciones como "Mi Barrio" o mediante las fotos denuncia expuestas en la sección Zoom , de la página diaria de Opinión de este medio.

En general, todo aporte que se haga a los organismos competentes para solucionar el problema de los hoyos en las calles de Arica, sin duda, es de agradecer, pero mucho más importante es estas anomalías sean anticipadas y especialmente resueltas con prontitud.

Los caminos de la vida en algunos espacios se pueden presentar ásperos, sombríos, dificultosos. No obstante, también, afortunadamente, encontramos senderos más transitables, más llanos, más luminosos, más placenteros, cuando tenemos a nuestro lado acompañándonos, apoyándonos, ayudándonos, a esos seres especiales que se llaman amigos, amigas, y que la Providencia nos envía para así asedar en algo nuestra peregrinación terrestre.

Qué dichosos y gratificados debemos sentirnos por todos los regalos de amistad que constantemente vamos recibiendo y que nos enseñan que la vida vale la pena vivirla y compartirla, siempre, con aquellos seres especiales con los cuales vamos uniéndonos con cuerdas invisibles, formando lazos indestructibles.

La señora Gabriela Puente Herrera, ex directora del Colegio Integrado, fue uno de aquellos seres especiales, que en su momento nos recibió con su mirada y sonrisa acogedora, que estrechó nuestra diestra como símbolo de todo el apoyo que recibiríamos de ella de allí para adelante, y que nos abrazó con sus palabras de bienvenida y de recepción sincera.

Somos muchos los profesores y profesoras, tanto en servicio como ya jubilados, que logramos suavizar parte de nuestro camino laboral, con el apoyo, amistad y cariño que constantemente recibimos de ella. Somos muchos los que tuvimos la dicha de compartir con ella, en el trabajo cotidiano del mismo colegio y en alegres convivencias y momentos de recreación y relajo.

Somos muchos, ahora, los que sentimos su partida de esta tierra, y de una u otra forma estuvimos con ella en la despedida final. Un adiós amargo, pero que se suaviza con el recuerdo de tanto afecto compartido.

Su alma ya ha retornado a su verdadero hogar, con toda la seguridad, con mucha alegría y con la satisfacción de haber realizado una óptima labor en esta vida, y con una inmensa porción de amistad que sembró y una fructífera producción de amor y agradecimiento que cosechó. Gracias, señora Gabriela, seguirá por siempre existiendo en nuestros corazones.