Era un ejercicio tan, pero tan cotidiano en estos tiempos tan tecnológicos, pero que a la larga se transformó en una tragedia al interior del local de comida rápida de Leonel Guillermo Chura Flores.
La madrugada del martes 5 de junio, el comerciante finalizaba sus labores al interior del recinto gastronómico de calle Arquitecto Joaquín Toesca, cuando desenchufó el cargador de su celular, acción por la que terminó electrocutado, asunto que obligó a la Fiscalía a abrir una investigación junto a la PDI.
El deportista de 42 años se convirtió en el tercer caso de muerte por electrocución al interior de su vivienda en lo que va del año, sumada a la del también comerciante Luis Castillo (35), quien falleció luego de que el agua con que intentara apagar un amago de incendio hiciera contacto con el enchufe de una congeladora (2 de enero) y a la de Tania Tapia Tapia (23), quien falleció tras recibir la descarga eléctrica de una lavadora, de la que su madre había advertido no usar porque tenía desperfectos (7 de marzo).
Es parte de la triste estadística de los denominados accidentes intradomiciliarios o caseros, donde según la estadística van 20 fallecimientos en los últimos dos años.
Caídas en el baño y escaleras
El subprefecto Carlos Bartheld, jefe de la Brigada de Homicidios de la PDI, reveló eso sí que entre las principales causas de muerte por accidentes en la región, están las caídas dentro de las casas, electrocuciones, asfixias, sumersiones e intoxicaciones por pesticidas en los valles de Lluta y Azapa.
"El accidente más común, aunque parezca de perogrullo, son las caídas, no de altura, las caídas simples, en la ducha, saliendo por un pasillo... esas", detalló.
El oficial llamó a las familias a tener un especial cuidado con los menores y adultos mayores, precisando que "lo que más afecta es cuando se trata de niños. Es complicado cuando vamos a veces a sitios de suceso donde las víctimas son pequeños, producto del descuido de los padres", dijo.
