La Asociación Nacional Automotriz de Chile, dio a conocer el comportamiento que ha tenido el mercado automotor en el primer semestre de 2018, dando cuenta de la venta de vehículos nuevos en el periodo, y su comportamiento respecto de los últimos años.

En general, las estadísticas indican que la compra de vehículos nuevos experimentó un alza importante respecto al mismo periodo de 2017, llegando a un incremento del 21,5% en el primer trimestre de este año.

Si bien a nivel nacional nuestra región no está dentro de los crecimientos más importantes en la venta de vehículos nuevos, sí se mantiene la tendencia observada el año pasado, cuando ya se veía que no sólo la venta de autos usados era negocio en la zona. Es así que en marzo el aumento fue de 17% respecto al año 2017, mientras que el acumulado en el primer trimestre llegó al 3,7%.

El tema habla bien de la salud de la economía regional, pero inmediatamente plantea desafíos y tareas. Esto, si pensamos en los más de 70 mil vehículos que componen el parque automotor en la comuna, la tendencia en el uso no es precisamente a la baja.

Es bueno que este tipo de estadísticas sean consideradas por las autoridades, especialmente comunales ¿Se está pensando la ciudad en función de esta realidad? Vemos, por ejemplo, como la avenida 18 de Septiembre, a meses de haber sido entregada tras los profundos arreglos que se realizaron, más que despejarse se ha convertido en una larga zona para estacionar, aun en sectores donde ahora y antes se prohibía hacerlo.

Ese es sólo un caso. El centro de la ciudad sigue siendo una zona para dejar vehículos, incluso en lugares donde no está permitido, lo que aumenta la congestión., Y qué decir del uso que se le está dando a plazas y parques para estacionar, entre los que están el parque Ibáñez, el sector de la Aduana o la Plaza Gabriela Mistral, sólo por nombrar algunos.

Es urgente que las autoridades realicen un trabajo intenso y efectivo para evitar que Arica termina siendo una ciudad pisoteada y colapsada por un parque automotor cuyo incremento, como se puede ver, no se detiene.

Desde hace un tiempo percibo en el ambiente una desalentadora sensación de falta de coincidencia entre lo que podemos considerar como espacios urbanos respetuosos y dignos y la realidad de la ciudad. Pareciera que Arica se ve, se siente y hasta "huele" olvidada, para analizar esta "Insatisfacción Ciudadana" lo invito a hacer un ejercicio.

Para muestra un botón: Recorreremos calle Baquedano en su parte más céntrica, comenzando en el Parque Carlos Ibáñez con dirección al Morro, Ud. Será testigo de un sinfín de irregularidades que en estos y otros espacios públicos, ocurren a diario. Partiremos entonces en el tradicional Parque con nombre de Presidente, con fuentes de agua, pero sin agua, imagen viva de que todo tiempo pasado fue mejor. Lo primero: ocupación de bienes nacionales de uso público, individuos que satisfacen allí todas sus necesidades básicas, consumen drogas y alcohol. Alrededor, decenas de perros vagos hambrientos y dolientes, parte el corazón. Antes de llegar a O'Higgins verá fachadas de inmuebles en deplorable estado de limpieza y conservación, algunos amenazan con ruina. La esquina de Baquedano y O'Higgins es historia a parte, frente a un conocido "Puesto de Verduras" encuentra su guarida un personaje triste de la ciudad, le apodan "Highlander" y pasa sus días allí, entre la vida y el alcohol. Miremos ahora el piso, adhiere una mezcla fétida de fecas y alimentos descompuestos ¿Por qué no tenemos una máquina lavadora de pisos como otras comunas? El líquido percolado y la pestilencia nos acompañarán hasta nuestra última parada. Al llegar a Maipú en la vía pública, encontramos un grupo de individuos que, diariamente, se dedican a beber y hostigar a transeúntes. Esta semana abrió sus puertas el Mall Plaza, pero no puede haber por un lado magia y por el otro oscuridad. La mantención de una ciudad requiere de la colaboración ciudadana, pero no olvidemos que el responsable de administrar la comuna es el Municipio, y es a quien le corresponde, por lo tanto, educar, fiscalizar, sancionar, en fin: Liderar. Así las cosas, vamos entendiendo lo que los ariqueños hemos venido haciendo mal, desde hace ya demasiado tiempo.