Camila Espinoza López
"Un verano sin polera" suele ser la meta de algunos adultos, quienes se esfuerzan por perder peso en estos meses. En otros casos, los padres esperan lograr "un verano sin pañal" y aprovechan el aumento de la temperatura para enseñar a sus hijos a avisar cuando quieren ir al baño.
Para los progenitores que no están seguros de si su hijo está preparado para aprender, existen una serie de factores que pueden guiar a los para saber cuándo comenzar el proceso.
"¿Cómo me doy cuenta de que está listo? Por ejemplo, si mi hijo obedece instrucciones sencillas como 'tráeme un lápiz'. También es signo de madurez que camine y corra. Cuando imita a un hermano y él también quiere ir al baño", dice Josefina Valdivia, directora de Pedagogía en Educación de párvulos de la Universidad del Desarrollo (UDD).
La especialista comenta que normalmente se les enseña a avisar a los niños entre los 18 meses hasta tres años, y que muchos padres suelen hacerlo cuando cumplen dos años y en la época veraniega.
"Los padres deben estar atentos a los hitos que el niño va a presentar y que orientan a que pudiese iniciar el control. Por ejemplo, sentirse molesto con los pañales y mostrar signos de que quiere que se los saquen", plantea Eduardo Ahumada, médico coordinador de la Unidad de Paciente Crítico Neonatal de Clínica Ciudad del Mar.
Añade que es clave entender que el proceso varía en cada niño, dependiendo de la madurez que tenga: "Los padres deben acompañar, dar confianza y seguridad en este proceso biológico que va a variar en el tiempo. El niño debe sentirse seguro y los padres entender que es un proceso que tendrá éxito y, a veces, fracasos".
Establecer una rutina
Valdivia dice a La Estrella que para comenzar el proceso se debe establecer una rutina con el niño: "Por ejemplo, en los primeros días, ir cada una hora al baño. Decirle 'vamos a ir ahora'. Si el niño hace, se aplaude y se le da un beso. Hay que hacer esto por algunos días".
Marcel Deglin, pediatra de Clínica Ciudad del Mar, explica que, a medida que pase el tiempo, las idas al baño pueden disminuir en el día: "Cuando funciona, se va alargando el horario cada dos horas y media, cada tres horas, y así sucesivamente. Hay que hacer este ejercicio por dos años aproximadamente".
Ahora, el rol de los padres es fundamental para recordar al pequeño que debe ir al baño.
El experto dice que, cuando el niño controla el pipí de día, durante la noche se puede usar un pañal nocturno, ya que al dormir podría mojarlo. Se puede eliminar definitivamente el pañal nocturno cuando el padre note que se mantiene seco.
Deglin, sin embargo, advierte que "se considera normal que ocurran accidentes y el niño se haga pipí, a veces de noche, hasta los siete años".
Zona de baño
Montserrat Sepúlveda, psicopedagoga de la Red de Salud UC Christus, sostiene que es clave acostumbrar al pequeño a hacer sus necesidades en el baño: "No le pongo la pelela en la pieza, que se acostumbre a que el lugar que debe ir siempre va a ser en el baño. Ahí es donde uno hace sus necesidades. Hay que darles señales claras a los niños".
Valdivia también se refiere al uso de la pelela y dice que hay accesorios útiles para usar la taza, ya que "en el caso de un niño muy bajito, le queda muy alto el excusado y se vuelve amenazador".
La especialista comenta que algunos padres optan por comprar tapas de baño con mango para afirmarse. "No hay que sentarlo directamente en el baño. Eso no los ayuda, porque realmente caben por el espacio y es un poco incómodo".
No retar
Valdivia añade que otro punto importante es que los padres sean persistentes en este proceso y no retar al pequeño si se hace.
"No hay que retarlos, porque se siente incómodo, devaluado y presionado. Que esto sea algo positivo, un logro", dice la experta.
Añade que, al felicitarlo, va a relacionar ir al baño con algo bueno, destaca la especialista. Además, señala que algunos niños se podrán demorar más: "Todo va en la madurez del niño y cómo acepta este proceso. Hay niños que se demoran un poco más, porque les costó más hablar, caminar. Entonces, el proceso es un poco más lento".
El vestuario
Valdivia recomienda que los padres piensen bien la ropa que pondrán a su hijo en este periodo: "Lo otro importante es si se pueden subir y bajar la ropa interior. Entonces, se recomienda ponerle traje de baño o pantalones sin botones, solamente con elástico. Cosas de ese tipo para que lo ayuden en su autonomía".
Sepúlveda también recomienda que los niños usen chalas plásticas, lo que hará más fácil el cambio de calzado si no alcanza a llegar al baño.
"Todo va en la madurez del niño y cómo acepta este proceso. Hay niños que se demoran un poco más, porque les costó más hablar, caminar"
Josefina Valdivia, directora de Educación de párvulos de UDD"