La derrota de Tyson
El episodio que le tocó vivir al ex boxeador Mike Tyson cuando trató de ingresar a nuestro país este jueves, levantó una ola de comentarios especialmente en las redes sociales, debido a las restricciones que en lo formal y en lo legal existen para que entren al país personas que no se ajustan a las normas de extranjería que rigen en Chile. De acuerdo a los comentarios de los usuarios de plataformas del ciberespacio como Facebook o Twitter, este hecho que involucró a un personaje famoso, mediático, y que venía con un programa claramente determinado a Chile, se distanciaría de la "realidad" que percibe la opinión pública respecto a la situación de los extranjeros en nuestro país.
Para el común de la gente, existe una alta permeabilidad para el ingreso de personas que vienen de otros lugares del planeta, y pareciera que los criterios que se aplicaron en el caso del ex deportista, no son los mismos que se aplican para el común de las personas.
Sin embargo, más allá de las percepciones, el análisis de la realidad del fenómeno da cuenta de los esfuerzos que realizan las instituciones en Chile para poder hacer cumplir la ley de Extranjería y, de esta manera, darle una mayor formalidad, orden, y la legalidad que corresponde a un fenómeno tan complejo como es el de la inmigración en nuestro país.
Según lo dio a conocer la PDI, en el mismo aeropuerto, cuando Tyson inició los trámites migratorios aparecieron los antecedentes que, de acuerdo a la ley nacional, le impedían ingresar a Chile.
El diario La Tercera daba conocer que nuestro país ha negado el ingreso a más de 8.000 extranjeros solamente durante este año. El 55% de quienes no pudieron entrar a Chile vieron frustrada la posibilidad al no acreditar la calidad de turistas, mientras que el 27% no pudieron llegar al país por tener antecedentes penales, tal como ocurrió con el otrora boxeador.
Si bien hoy se discute la necesidad de una nueva ley de Extranjería, las instituciones en nuestro país se esfuerzan por hacer cumplir la actual.
Algo muy distinto al ingreso ilegal, especialmente por lugares no habilitados e incluso, bajo delitos como la trata de personas.