La ciclovía de alto estándar llegó para quedarse, sólo basta ver la recepción que ha tenido en un poco más de un año de implementado sus diferentes tramos. Sabemos lo trascendental que ha resultado esta obra para quienes, a diferencia del resto del país, se trasladan a sus puestos de trabajo diariamente.
Hoy estamos entregando más seguridad a nuestros vecinos y vecinas que se movilizan por la red de ciclovia de alto estándar, que ya cuenta con 5,82 kilómetros de extensión, en sus tramos de Av. Santa María y Santiago Arata (entre Amador Neghme y Diego Portales); más Renato Rocca (entre Santa María y Alejandro Azolas) y Amador Neghme (Santiago Arata y Linderos). Ello es parte de una red de corto plazo de 20 kilómetros, que a su vez forman parte de una red básica de 40 kilómetros.
Recordemos que uno de los objetivos es mejorar la calidad de vida de los ciclistas ariqueños y entregar más seguridad al contar con una ciclovía de alto estándar, lo que permite la conexión entre la zona norte de la ciudad con un punto importante de centros comerciales, educacionales y laborales.
Sin embargo, sabemos que se trata del comienzo de un cambio, para entender la ciudad desde el punto de vista distinto al automóvil, con un enfoque más amigables con el medio ambiente y que contribuyan a una mejor calidad de vida. Es el inicio de un camino que debemos recorrer en conjunto para lograr el real cambio cultural; en donde convivan el automovilista, el peatón y el ciclista, respetando sus espacios y particularmente el del otro.
Esto no es tarea fácil puesto que, a pesar de que la ciclovia de alto estándar cumple con toda la normativa vial, implica un cambio de conducta, nuevos hábitos y formas de relacionarnos en el espacio público. Por ello se trata de un esfuerzo en donde están todos y todas involucrados, para hacer de nuestra ciudad un lugar más amigable y sustentable para vivir.
Somos todos los habitantes de la Puerta Norte, los responsables de informar, informarnos y mejorar los aspectos necesarios para impulsar una cultura vial y con ello seguir destacándonos a nivel país por utilizar nuestra red de ciclovias con un claro enfoque de equidad, es decir, incorporarla como el trayecto diario desde el hogar al trabajo, estudio y viceversa, lejos del mero uso recreacional.
La invitación, entonces, no es sólo para seguir construyendo nuevas redes que ya están en proceso de diseño; sino construir una verdadera cultura vial que deje atrás los accidentes automovilísticos y atropellos que ocupan la atención de los medios de prensa, en especial los fines de semana y feriados. La invitación es a sumar esfuerzos por una mejor ciudad para todos y todas.
Claudia Bustos Carpio
Seremi de Vivienda y Urbanismo