El ayer y hoy de El Tacorita: el señor del calzado
Empezó de cobrador y terminó comprando la tienda, con la que sobrevive con el sistema del lápiz y cuaderno. "Todavía creemos en la palabra", declara.
Abraham Bugueño tiene 66 años es conocido en Arica como "El Tacorita", ya que casi toda su vida está ligada a la zapatería que lleva ese nombre y que abrió sus puertas en Arica el año 1972.
En aquellos años, Bugueño trabajaba en la tienda como cobrador y luego, el año 80, compró la tienda y se convirtió en el dueño de Calzados Tacorita.
"Tengo 45 años de mi vida dedicados a esta tienda, que tuvo años de gloria, y años no tan buenos. Por ejemplo recuerdo como la gente hacía fila para que uno lo atendiera, buscaban zapatos de cuero y nacional, no como ahora que hay de todo tipo", contó.
Al lápiz
Desde esos años hasta ahora, la zapatería siempre ha funcionado bajo dos sistemas: pago al contado o al lápiz (donde los clientes pagan en cuotas).
"Eso se hace desde los años 70, donde la gente anotaba lo que debía y pagaba en cuotas y se sigue haciendo, porque todavía tenemos clientes que tienen cuenta con nosotros y son responsables al pagar", dijo Bugueño.
Aunque el zapatero también afirma que hay varios que no le han cancelado y figuran en los cuadernos antiguos. Y es ahí donde la tarea de cobranza se vuelve importante. Por eso Bugueño cuenta con dos colaboradores; Gastón Zúñiga y Camila Cutipa, quienes cuaderno en mano van anotando las deudas que quedan.
"Nosotros todavía creemos en la palabra de la gente. Y por eso hemos calzado a generaciones de ariqueños, que aunque se van de la región y vuelven se sorprenden al ver la tienda abierta", comentó.
Calzados de antaño
Entre las vitrinas de Calzados Tacorita se lucen varios modelos de zapatillas, zapatos escolares, tacones y botas de temporada. Sin embargo cerca del mesón de la tienda, se ven unos zapatos que al verlos causan nostalgia. Se trata de unos calzados de los años 80 y 90, que eran usados por los bebés y niños de la época.
"Antiguamente el calzado era nacional y de calidad, pero eso duró hasta el 90, porque después llegó la era del zapato chino y barato, pero estos con el tiempo también mejoraron su calidad, por eso aún vendo de los dos tipos" aseguró Bugueño.
Este ariqueño, padre de 4 hijos y abuelo de 3 nietos comentó que gracias a los zapatos sacó adelante a su familia y a sus hijos que hoy son profesionales. Y a pesar de que la tienda ya no es la misma de antes, comenta que sobrevive gracias a su clientela fiel.
"Gracias a Dios me ha ido bien y tampoco he sufrido grandes robos. Solo un robo hormiga, que pasó en un descuido mío. Y el cliente se fue con los zapatos nuevos sin pagar y dejó los viejos en la tienda, fue divertido", recordó.
Asimismo recordó como antes se vendían las zapatillas Match y Diadora, marcas que ya no existen. Pero afirma que seguirá innovando en la tienda.