3 fases en la muerte del hombre que alguna vez apareció en horario prime
Por qué estaba en ese sector, la trayectoria de la bala y su relación con la muerte de un hombre al que le cortaron las orejas en el Río San José, historia llevada a la televisión.
Alas 11.45 de ayer, el vehículo del Servicio Médico Legal retiró desde el pavimento y para siempre el cuerpo de Alexis Porras Uribe, el hombre de 38 años que recibió un impacto balístico en su cabeza.
Tres horas antes, Alexis había sido víctima de un sujeto quien de la nada, sacó un arma y le disparó al rostro, terminando con sus signos vitales ¿Pero qué antecedentes rodean a un nuevo homicidio en la ciudad?
Condominio
El primer antecedente lo hace llegar la Fiscalía y apunta a que poco antes de las 9 de la mañana, Alexis Porras llegó arriba de un taxi hasta la Población Poconchile, específicamente afuera del Condominio Bello Horizonte, de la esquina de París con Luis Pasteur, donde debía dejar a su pareja.
Fue en ese mismo momento que al descender del vehículo, un supuesto auto habría aparecido en la escena, desde donde alguien disparó a la víctima. "Tras lo anterior, personal del Labocar y de la SIP iniciaron de inmediato las laboras de búsqueda del o los responsables del delito, como también verificar qué tipo de arma se utilizó en el homicidio", especificó el fiscal Francisco Ganga.
Salida de proyectil
Luego de periciar el cuerpo, Carabineros del Labocar fueron los encargados de establecer la trayectoria del impacto balístico, como además de cotejar los restos orgánicos (sangre) y si existían más proyectiles en el sitio del suceso.
"Claramente podemos establecer que el proyectil ingresó cerca del parietal izquierdo de la cabeza de la víctima, saliendo por el lado derecho de la misma. Ahora, en el sitio del suceso no encontramos más restos o indicios de otros disparos, por lo que habría sido un solo disparo el que se percutó a la hora del ataque", explicó el capitán Jaime Valenzuela, subjefe del Labocar.
El capítulo de mea culpa
En 1999, en el segundo capítulo de su séptima temporada, el entonces programa policial Mea Culpa, recreó el crimen de unos adolescentes que se ensañaron con Rubén Pascual Urquieta (32), joven con quien discutieron en una fiesta y luego golpearon y lanzaron al lecho del Río San José, para después cortarle las orejas y rematarlo con una roca en la cabeza.
Uno de esos adolescentes luego detenidos y que contó su versión a las cámaras de Carlos Pinto y TVN fue Alexis Porras, quien dentro de prisión, explicó que todo lo que hizo, fue bajo los efectos de las drogas.
Ahí relataba su arrepentimiento, sus ganas de rehacer su vida y los sueños que tenía en mente, de los cuales algunos, claramente, no alcanzaron a cumplirse.