La bombera de Azapa que luchó con el fuego del sur
Ante la catástrofe en las zonas afectadas por los grandes incendios forestales, Danisa se enlistó en las filas para combatir codo a codo las llamas junto a sus compañeros.
Danisa Cutipa Arellano tiene 21 años, pero ingresó a los 16 como aspirante a la Séptima Compañía de Bomberos Jaime Tapia Guerrero, de San Miguel de Azapa. Este año cumple 4 años como voluntaria y cursa el cuarto año de Tecnología Médica en imagenología y física médica de la Universidad de Tarapacá.
Con todo ese curriculum y experiencia fue una de las 3 ariqueñas de 42 voluntarios que viajó al sur a combatir los incendios que dejaron a muchas familias damnificadas. Es que Danisa no quiso estar ajena a esta tragedia, ya que cada vez que veía las noticias en televisión, visibilizaba lo que estaba pasando con los incendios y estaba clara que sus colegas y las personas necesitaban ayuda, por lo que su familia no opuso resistencia a que pudiera viajar y ejercer su voluntariado en Portezuelo, lugar donde se vivió una situación de absoluto descontrol, cuando fuertes ráfagas de viento descontrolaron el fuego existente llevándolo a desplazarse a gran velocidad en la zona.
En LA zona afectada
Una vez allí, Danisa permaneció 8 días junto a sus compañeros luchando contra los incendios, apoyando en rescates y otras labores que la agotaron, pero que nunca la hicieron rendirse, por eso trabajó codo a codo junto a los cientos de voluntarios de otras regiones que también llegaron a reforzar la ayuda.
"Ser bombero es verdaderamente gratificante, porque la gente siente tu ayuda, tu cooperación y no te lo agradecen con dinero, pero está la preocupación de llevar comida, vestimenta, agua y el agradecimiento de la gente", contó Danisa Cutipa.
Siempre alerta
Durante su permanencia en la zona afectada, Danisa recibió todo el cariño de la gente de la zona, que muy agradecida con el trabajo que realizaron junto a sus compañeros bomberiles, se lo manifestaban con todo lo que tenían a mano.
Durante ese período el trabajo fue extenso y por eso en varias ocasiones Danisa solo pudo dormir 2 horas diarias. Es que la emergencia no descansaba y ella lo sabía muy bien, por eso permanecía alerta.
"Uno siente de verdad miedo, porque ve el fuego encima", comentó.
Aprendizaje
Después de su colaboración en el sur llegó a Arica con toda la experiencia que le dejó ese viaje, donde pudo conocer y trabajar en otro tipo de terreno, con una fuerte vegetación y viento cambiante, además de la necesidad de buscar otros medios para extinguir el fuego.
Hoy en día la universitaria cree que no existe discriminación en Bomberos.
"Yo creo que somos tan capaces como ellos, pero quizás sí existen algunas limitaciones físicas. Biológicamente hombres y mujeres no somos iguales, los hombres siempre van a tener un poco más de fuerza, pero eso no nos limita a nosotras a ser bomberas, porque va más en una capacidad de voluntad, de resistencia, y sicología, porque el cansancio pasa la cuenta y las mujeres siempre somos más aguerridas", puntualizó Danisa durante el homenaje que les brindó el Servicio Nacional de la Mujer y la Equidad de Género en el marco de las actividades de conmemoración del Día de la Mujer.