Los pasajes comprados, bolso listo para volver a la ciudad que lo vio nacer, Arica. Marco Araya Orellana, de 43 años, terminó su turno de 5X2 en una minera en Antofagasta y hasta había cobrado su anticipo. Su esposa y su madre los esperaron, pero nunca llegó, hasta que les informaron que fue asesinado en dicha ciudad.
Gregoria Orellana, madre de Marco contó que su hijo trabajaba de lunes a viernes y viajaba los fines de semana a su hogar, pero este sábado era especial, tenía que llegar sí o sí. Los motivos se iban a reunir todos los hermanos (5) incluso algunos viajaron de otras regiones.
"El tenía que estar en Arica, era un día muy especial, teníamos que ir a la notaría a firmar un documento junto a sus hermanos, porque estoy vendiendo una casa. Lo estábamos esperando", contó.
TRES versiones
Gregoria contó que ese día le dieron tres versiones de la muerte de su hijo, primero la llamaron y le informaron que había chocado en auto, segundo que lo habían acuchillado y tercero que lo mataron porque le habían robado.
Para esta madre todo era confuso. Sin saber qué realmente había ocurrido, lo esperó todo el día sábado, pero no llegó. La última información que le entregaron fue que dos sujetos le propinaron una brutal golpiza en la cabeza y luego falleció en el Hospital Regional de Antofagasta.
Fútbol
Pero ¿quién era Marco, un hombre orgulloso de ser ariqueño? Sus hermanos y amigos lo definen como una persona muy alegre y humilde. Estudió su enseñanza básica en la Escuela Ricardo Silva Arriagada E-15 y la media en el Liceo Octavio Palma Pérez. Casado con Claudia Campillay Órdenes y padre de tres hijos de 24, 14 y 11 años. Se dedicó a trabajar como contratista en faenas mineras, no dejando nunca de lado su gran pasión, el fútbol.
Su hermano mayor, Rigoberto Araya, contó que Marco era hincha de dos equipos de fútbol Colo - Colo y de San Marcos de Arica. Señaló que siempre iba al estadio a apoyar a los Celestes. Además, jugaba como 10 en el equipo de Asocapec en la liga Viejos Cracks en la cancha Esteban Alvarado y se habían coronado campeones de un torneo.
Muy alegre
En su familia era conocido como "El Loquillo" . Su hermano contó que Marco tenía una personalidad muy alegre, siempre estaba con su sonrisa a flor de piel, bromeando y molestando a los demás y nunca se quedaba tranquilo. También perteneció a una agrupación afrodescendiente.
"Era muy buen hijo, siempre dispuesto en ayudar a las personas. Creo en la justicia divina a Dios no se le puede ocultar nada", expresó su mamá.
Sus restos serán sepultados hoy a las 16 horas en el Cementerio Municipal al lado de su padre.