La esquiva taruca se acerca a estar en peligro de extinción
Guardaparques de la Conaf Arica y Parinacota iniciarán el conteo de la especie en toda la precordillera de Putre
Las tarucas, conocidas también como el huemul del norte, se encuentran en estado crítico, por lo que la Conaf Arica y Parinacota iniciará la próxima semana el conteo de la especie en toda la precordillera de Putre.
Seis guardaparques usarán bastones de trekking serán los encargados de buscar a los esquivos animales, ya que el recorrido será por terrenos con pendientes altamente pronunciadas. Como la especie es difícil de avistar, por su capacidad de mimetizarse con el paisaje silvestre de la zona, las caminatas se harán en horarios de amanecida y atardecer.
La Conaf efectúa conteos de la especie dos veces al año: en época estival o lluviosa (marzo o abril) y en la época seca (invierno).
El biólogo Esteban Zúñiga, encargado de la sección Conservación de la Diversidad Biológica, de Conaf regional, explicó que "lo que se busca es resguardar que la especie mantenga presencia en su hábitat. El propósito es realizar avistamientos directos e indirectos. En estricto rigor más que un registro total, es monitorear que la taruca siga presente en los lugares que han sido su hábitat a lo largo del tiempo".
Más allá del parque
"Este trabajo persigue verificar esta presencia, mediante los recorridos en diez sectores diferentes de la precordillera, desde el borde del Parque, pasando por diversos puntos de la precordillera de Putre y alcanzando también sectores de la comuna de Camarones", agregó Zúñiga.
Según indicó el director regional de la institución, Leonel Quintana, "lo desafiante para nuestra institución es la oportunidad de ampliar la labor de conservación más allá del Parque Nacional Lauca, ya que se incluyen los bordes del área protegida".
Durante el presente año la institución, actuando en su rol de secretaría técnica nacional para este trabajo, actualizará el "Plan nacional de conservación de la taruca", por lo limitado de su distribución en el territorio nacional.
El segundo registro del 2016, arrojó un total de 54 tarucas captadas en 14 avistamientos directos, lo que da cuenta de su permanencia en el hábitat, pero no necesariamente de la población total.
Una peculiaridad de las tarucas es que todos los años recambian su cornamenta. Su altura es de alrededor de 80 centímetros y el largo de su cuerpo varía de 140 a 165 centímetros. Su cola le agrega entre 10 a 13 centímetros a estas medidas.
Amenazas de la especie
Actualmente la taruca enfrenta amenazas por competencia con el ganado doméstico, alteraciones de su hábitat, ataques de perros y caza ilegal.
Al respecto, Leonel Quintana precisó que "junto con las observaciones y cifras que se recojan en el conteo de tarucas, sumaremos asimismo la mirada de los actores del territorio, ya que los guardaparques tomarán también contacto con los residentes de las cercanías, para indagar sobre sus inquietudes en la convivencia con este recurso de nuestra fauna regional".