El martes fue el segundo día de clases para Matías San Martín, alumno de primer año de Ingeniería Civil Industrial de la Universidad de Tarapacá (UTA).
Como todo estudiante que recién comienza su vida universitaria, tuvo su bienvenida. El mechoneo fue como se acostumbra en algunas carreras: Juegos, bolsas de basura encima del cuerpo, un baño con barro y desperdicios. Una práctica que para muchos resulta vejatoria y debiera ser abolida.
Sin embargo, el saludo mechón no salió tan "simpático" como se esperaba y San Martín terminó hospitalizado y con una fractura de dedo anular.
"A pesar de todo fue un buen mechoneo. Asumo que el accidente fue culpa mía, nadie me obligó a pasar por el mechoneo, quería vivirlo y sentirlo", explicó el joven, quien en medio del ritual de bienvenida tropezó con una manguera, cayendo al piso con la fractura como consecuencia.
A pesar de los dolores y de encontrarse esperando un cupo para ser operado, San Martín agradeció el apoyo que le han transmitido sus compañeros y los mechones de otras carreras.
"Me han mandado hartos mensajes esperando que me recupere. El día del accidente también me auxiliaron altiro", recordó.
Repudio
La UTA, a través del director de Asuntos Estudiantiles, Juan Trevizán, repudió el acto. Los accidentes ocurren en todas partes, eso es algo que hay que entender. Sin embargo, los mechoneos que pueden terminar en este tipo de acciones no los patrocinamos y se lo hemos hecho saber a los alumnos".
Trevizán destacó que como institución han tratado de erradicar la práctica y que esta ha ido disminuyendo con el pasar del tiempo.
"Este tipo de recibimiento no lo podemos eliminar de un día para otro, sí entendemos que es algo denigrante y por eso, queremos que existan otro tipo de bienvenidas. Podríamos decir que un tercio de las carreras mantiene la tradición y esperamos que cada año sean menos los mechoneados de manera vejatoria", sostuvo.
Finalmente, el director anunció un sumario contra quienes resulten responsables, lo que puede traer como consecuencia desde una amonestación hasta la expulsión de los involucrados.
¿ritual necesario?
Desde el lunes es posible ver a los mechones por diversos sectores de la ciudad solicitando dinero para cumplir con la cuota que asignan sus compañeros y así recuperar sus pertenencias.
La práctica de este ritual ha sumado detractores, ya que además de conseguir el dinero, los estudiantes se pasean en bolsas de basura e impregnados de mal olor, producto de los desperdicios que les tiran encima como "bienvenida".
Daniela Castro, mechona de Trabajo Social, señaló que su bienvenida no fue violenta.
"Pudimos conocernos con los demás compañeros y pasar un buen momento. Por suerte no fue terrible como pensé que sería".
Para Ángel Luza, lo ideal sería que el mechoneo no incluyera la recolección de dinero.
"Sabemos que es una tradición y no encuentro que sea malo, pero pasearse por el centro sin ropa, con mal olor encima y pedir dinero es mucho. A veces hay turistas y dan una pésima impresión".
Claudia Lobos, en tanto, opinó que los estudiantes podrían realizar obras sociales. "Deberían apoyar a alguna institución como parte de la bienvenida".