El financiamiento de la política es un tema delicado y que desde hace meses tiene ocupadas a la Justicia y a la opinión pública, a raíz de bullados casos en los que han salido a relucir parlamentarios, empresas mineras no metálicas, grupos financieros, pesqueras y ex familiares de un dictador militar, entre otros.

Lo es, porque a través del aporte de recursos, empresarios y grupos de poder pudieran eventualmente ganarse el favor de autoridades, para que estas actúen a su favor en el ejercicio del poder.

También, porque al entregar mayores recursos a unos que a otros puede favorecer a candidatos que resulten electos a punta de inversión publicitaria y hasta de formas más o menor encubiertas de cohecho y por sus méritos o el valor de sus ideas.

Por último, porque la política es una función y un ámbito de acción esencialmente público y la ciudadanía tiene, por tanto, todo el derecho a conocer el origen uso y destino de sus dineros.

Nuestra región había sido tocada por este tema, a propósito de la situación que afecta al desaforado senador Jaime Orpis, pero esta semana se conocieron antecedentes de otras situaciones que involucran a niveles locales de la estructura administrativa y partidaria.

A grosso modo, el tema aquí es la solicitud de aportes en dinero a militantes del PPD, incluyendo a autoridades regionales y provinciales, para las arcas del partido. Lo más extraño del caso, y el centro de la denuncia, es que estos dineros no debían ser depositados en la cuenta de la tienda política, como lo establece la ley, sino en cuentas personales.

Los antecedentes, dados a conocer por el renunciado ex seremi de Energía resultan preocupantes y es necesario que el tema se esclarezca, en beneficio de la necesaria transparencia y la confianza de la comunidad en sus representantes y autoridades.

Pero es necesario ir más allá del caso puntual y dilucidar, primero si efectivamente hay aquí una irregularidad o delito y, además, si se trata de un hecho aislado o de una práctica que se repite en otras colectividades, de cualquier sector.

La fe pública requiere esas respuestas.

"No conozco la llave del éxito , pero la llave del fracaso es tratar de agradar a todo el mundo".

Dejen de pasarse rollos, esta inteligente frase no la inventé yo, creo que es del comediante Bill Cosby, el mismísimo que llevaron a juicio por califa, en USA.

Pero esta meditación la voy a usar para expresar mi inquietud por la hemorragia de ofertas que se nos vienen encima con los eventos eleccionarios de este año, y además que por mi larga experiencia estoy seguro que estos ofertones no cesarán al final de las elecciones, y que obvio están relacionadas para agradar al perraje ofreciendo huesos sin carne. (aquí me incluyo para que no me acusen de discriminador).

En tiempo record se tramitó la ley de feriado el día 2 de Enero cuando el día 1° sea domingo. Parlamento transversalmente aplicado y sacrificado, sobre todo cuando su sueldo es de muchos palos y que lo pagan los que producen impuestos en el país. (porqué no se usaría esa velocidad en asistir a sesiones? Personalmente me gustan los feriados largos, a quien no?, pero que va a pasar cuando el 1 de Enero caiga Jueves, ¿se va a decretar feriado legal el Viernes + el Sábado y el Domingo? Igual con otras matemáticas calendarias por Fiestas Patrias, Semana Santa, Día del Trabajo etc… reconociendo que muy pocos chilensis no aprueban estos feriados, pero para el que necesita producir el billete día a día, trabaje o no trabaje, pues no puede dejar de pagar arriendos, sueldos, imposiciones, patentes, previsiones, etc , es francamente un abuso del legislador.

Quisiera que todas las leyes sin exclusión, sobre todo aquellas que serán permanentes como ésta, sean meditadas un poco más, porque estas licencias se pueden dar en países de la premier league donde hay reservas para atender estas farras. Y nosotros , los de la roja estamos aún en tercera división, pateando para entrar a segunda , y cuando no se tenga la seguridad de las repercusiones, mejor se decreten como transitorias , para sopesarlas posteriormente mejor.