Sitios y conductas peligrosas
Los hechos que desencadenaron en la muerte de un joven matrimonio en el sector de Chinchorro, hace sólo unos días, no sólo han impactado a la comunidad local, sino que también dejan una serie de aspectos que son dignos de analizar y especialmente, de corregir.
El sitio ubicado junto a la Piscina Municipal se ha usado particularmente como un estacionamiento para este recinto, cuando en éste se realizaban grandes eventos deportivos, de esos que hace tiempo no se ven. Más se consolidó con el tiempo como escenario para las ramadas, por ejemplo, o la práctica de deportes como el béisbol.
Lo cierto es que se trata de un terreno que a la luz de los hechos, ofrece grandes oportunidades, ya sea para la inversión pública o la privada. Y sin embargo, hoy se ha convertido en un punto de reunión de automovilistas que lamentablemente, no sólo van a compartir sanamente.
No se trata de las competencias de música y equipos a todo volumen. O los juegos probando motores. Se trata del consumo de alcohol, de la violencia latente, de los desafíos y de incluso, historias delictuales encubiertas y de alcances insospechados, como lo que finalmente ocurrió ese fatídico fin de semana.
El hecho, sin duda, deja una serie de interrogantes que apuntan a lo que se podría haber hecho para evitar esta tragedia. La evidencia de envases y desperdicios cada domingo en la mañana, especialmente, hablan del consumo de alcohol, el que innegablemente se mezcla con la conducción. Sin embargo, el terreno siguió acaparando fieles.
Por qué un sitio de esas características, con el uso que se le está dando, no fue cerrado. Por qué las fiscalizaciones no dieron resultados. Quienes de una u otra manera han estado desafiando la ley, no han visto perturbadas sus costumbres de fines de semana.
Es un tema respecto al cual toda la comunidad debe estar atenta. En el caso de las autoridades competentes, que la experiencia impulse a analizar bien qué sitios y lugares eriazos pueden ser focos de inseguridad, y tomar las medidas que corresponda para evitar que sean escenario de hechos delictuales.