Opción por la vida

E-mail Compartir

Mi madre tuvo a mi hermano a los 11 años, tras ser violada reiteradamente por su padrastro. Dos años después, a los 13, me tuvo a mí, también por una violación, esta vez del vecino que la había acogido tras ser echada de su casa por su primer embarazo. Ella tuvo la posibilidad de abortar, pero optó por la vida y siempre nos enseñó que la vida es sagrada y es un regalo que hay que cuidar.

Marta Aravena Gutiérrez