La situación de Arturo Vidal sigue dando que hablar a poco más de 24 horas del duelo entre Chile y Bolivia, por el tercer partido del Grupo A de la Copa América.
Y uno que quizás muchos querían escuchar es Claudio Borghi, quien durante su proceso al mando de la selección marginó al volante y a otros cuatro jugadores por el recordado "Bautizazo".
"Lo adoro a Vidal, cuando lo veo jugar me llena de orgullo, pero en algún momento hay que hacerle entender que se equivoca. Estos chicos llegan, se juntan con gente que no ven durante el año y nadie les recrimina porque son figuras", dijo al programa América & Closs de Argentina.
"Todo es alegría, y a veces te llevan por el mal camino. Vidal es un chico extraordinario, muy humilde. Yo hace años vengo discutiendo por una formación integral del jugador, que vaya al colegio, que se preparen", agregó.
Borghi también recordó el episodio del "Bautizazo" y todo lo que significó para su carrera, que a la larga fue clave para que más tarde dejara su cargo al mando de la "Roja".
"Si yo no hubiese tomado la medida que tomé me hubiesen crucificado. Tengo fama de buenito, permisivo, pero tomé la decisión que creí necesaria. Ningún dirigente me apoyó, como le pasa a Sampaoli ahora poniendo el pechito solo. Me pongo en los pantalones de Sampaoli. Son situaciones complicadas", sostuvo.
"La sensación que queda es que hay que ganar, después veremos qué sucede. Me sorprendió la situación de Vidal. A veces piensa que son situaciones pasadas. Han pasado los años y los veo reírse todos juntos y pienso que el único que me cagué con la decisión fui yo. Ahora le pasó al mejor, ¿pero qué pasa si le pasaba al peor?", añadió.
Finalmente, Borghi confesó: "Después de esa decisión que tomé en 2011 se me ha complicado mucho la vida. Fui el único en tomar la decisión de sancionar".
DESDE EL SIFUP
Cuando el "Bautizazo" estalló en el 2011, los cinco jugadores involucrados tuvieron el apoyo de pocos. Uno de esos fue el Sindicato de Futbolistas Profesionales, Sifup, quien los respaldó y aconsejó en todo momento.
Esto generó una tensa relación entre el presidente del organismo, Carlos Soto, y el técnico de ese entonces de la selección chilena, Claudio Borghi.
Y ahora, con Arturo Vidal nuevamente envuelto en una polémica que pudo haberle costado la marginación de la "Roja", el timonel del Sifup explica las diferencias con lo sucedido hace cuatro años atrás.
"Hay una diferencia muy importante. Para el 'Bautizazo' estaban solos, sin apoyo. En cambio ahora Arturo sí tiene el apoyo del técnico", comenta el ex futbolista al medio de prensa Emol.
Consultado por si el Sifup estaba ya preparado para actuar si es que Sampaoli decidía sancionar al volante de la Juventus, Soto comenta que "ni siquiera he hablado con Arturo. Esa vez (2011) hablamos inmediatamente y él estaba muy sentido".
Finalmente, apunta que la decisión que tomó el casildense "tiene que haber sido muy difícil, pero son decisiones técnicas". J