El legado de una gesta
Hoy nuestra ciudad llega al momento central de sus festejos. La fecha que rescata la gesta del Asalto y Toma del Morro de Arica, no sólo es hoy recordada como el día símbolo de la ciudad sino que también como el Día de las Glorias de la Infantería Chilena.
El 7 de junio de 1880 registró uno de los episodios más emblemáticos de la Guerra del Pacífico, el que comenzó a dar vida y forma a esta ciudad que hoy conocemos. En términos de historia militar, la batalla destaca y se analiza por su desarrollo y planificación. Sin embargo, más allá de la estrategia, a ojo de simple ciudadano llama la atención el desafío que fue en todo sentido el asaltar el histórico peñón. De ahí que se habla de la bravura, decisión y valentía de los soldados que llevaron a cabo esta gesta.
¿Qué significa hoy para Arica este fragmento tan importante y fundamental en la historia de esta tierra? Sin duda, debe ser un sello, una impronta para quienes nacen, viven y construyen ciudad y región en el extremo norte del país.
Hoy no es una guerra la que llama a manifestar cualidades como las que caracterizaron a aquellos chilenos. Más bien, es la necesidad de hacer crecer y de desarrollar esta región y Arica misma.
Día a día, no enfrentamos los cientos de metros que significa avanzar hacia la cumbre del Morro, pero sí tenemos ante cada uno de nosotros las tareas, grandes y aparentemente pequeñas, que van haciendo que esta ciudad sea lo que es.
En cada vecino, autoridad, en cada ciudadano está la posibilidad de construirla mejor y más potente, o mediocre y desmejorada.
Seguramente, en estos días buena parte de la comunidad ha podido disfrutar del nutrido programa de actividades que se dispuso para celebrar el aniversario ariqueño. Sin embargo, es también tiempo de reflexionar respecto a la herencia que dejaron los "Bravos" en Arica, hoy no una desde un punto de vista bélico, sino en el espíritu y la personalidad de una comunidad decidida, luchadora y comprometida.