l Un par de niños, dos adolescentes y uno que otro adulto que se mojaron alrededor de la especie de pileta pública que se formó tras el accidente, fueron los únicos beneficiados luego de que una retroexcavadora que realizaba faenas de reposición de la solera, partiera en dos un grifo de avenida Yerbas Buenas, entre las calles Francisco Urzúa y Agustín Marín, en la población Jallalla.

El hecho ocurrió a las 15.45 de ayer, instantes en que la pala de la máquina echó abajo la mitad del grifo, provocando el derroche de varios litros de agua y la inundación de gran parte de la arteria.

200 CLIENTES SIN AGUA

Producto de la emergencia, 200 familias resultaron sin suministro, mientras que entre Carabineros del Cuadrante 10 de la Subcomisaría Chinchorro Norte y los trabajadores de la faena, cercaron el lugar hasta controlar la situación.

De inmediato, Aguas del Altiplano se trasladó al lugar e informó que desde las 18.30 y por lo menos hasta las 22 horas de ayer, el suministro se suspendió a raíz del trabajo que se realizó en el lugar. J

Los vecinos del sector del Pedregal Bajo fueron quienes se percataron de un horrible caso de maltrato animal, donde un perro mestizo y su amo boliviano de 81 años, fueron los protagonistas de la sórdida escena registrada en el sector sur de Arica.

En horas de la tarde, el extranjero llegó hasta el lecho del Río San José con el ejemplar canino arriba de una carretilla, con el propósito de practicar una eutanasia artesanal y terminar con el sufrimiento y la vida del animal, quien había sido atropellado cerca de Año Nuevo.

Tras arribar al peladero y envolver a la mascota en ropas viejas que se encontraban en el recinto, tomó varias rocas, entre eso un pedazo de bloqueta, y comenzó a lanzarlas contra el can, para así terminar con la vida.

Lo peor de todo (o mejor de todo si usted prefiere) es que el animal logró zafarse de entre las prendas y huyó del lugar a puros aullidos, lo que llegó a oídos de los testigos, quienes finalmente lograron socorrerlo y denunciar al ciudadano extranjero, quien argumentaba una historia de amor y odio con la mascota, a la cual pretendía sacrificar por las lesiones que presentaba después de ser arrollada.

Lo concreto es que funcionarios de la Brigada contra Delitos Medioambientales de la PDI (Bidema) recepcionó la denuncia y dio con el paradero del hombre de 81 años, quien vivía cerca del sector y por lo que fue detenido en el Cuartel Belén, hasta que el fiscal de turno dio la orden de libertad, previa citación a declarar al Ministerio Público. J