Colonias de verano: Para dejar de lado los celulares
Más de 1.000 niños y jóvenes comenzaron ayer a tomar parte de las llamadas Colonias de Verano.
Las actividades partieron en 8 recintos entre parroquias y colegios que están apoyando esta séptima versión.
Las colonias son una iniciativa de la Diócesis de Arica a través de jóvenes estudiantes universitarios comprometidos con Jesús y su mensaje cristiano.
Asimismo, para apoyar la parte de alimentación se cuenta con el aporte diario de la Junta Nacional de Auxilio Escolar y Becas (Junaeb).
Daniel Acevedo, coordinador de las colonias de verano impulsadas por la parroquia San Ignacio y que se llevan a cabo en el Colegio Saucache, dio a conocer que 'tratamos de brindar a los chiquillos, entre un rango de 4 a 14 años, una semana diferente y con eso nos referimos a que ofrecemos juegos, dinámica de grupos, talleres, todo eso bajo el alero de nuestro guía, como es Jesús'.
En concreto, el coordinador expresa que en este tiempo en jornadas que comienzan a las 9 y se extienden hasta la tarde, los monitores se hacen cargo de talleres como cocina, cine, pintura, catequesis y los juegos en los patios.
'En cierto momento del día también les enseñamos la doctrina de Jesús, como es compartir, la amistad, la solidaridad' resalta Acevedo.
Sólo en el colegio Saucache hay 200 niños y jóvenes participando de las colonias de verano, apoyados por cerca de 80 monitores.
Felipe Andrés Villalobos, es uno de los niños que está participando de la colonia que se efectúa en el Colegio Saucache.
Felipe cuenta que 'me gusta esto porque nos podemos entretener acá y no hay discriminación, reciben a todos los niños con problemas y nos divertimos sanamente, sin los celulares y esas cosas'.
El estudiante 8° Año Básico de la Escuela República de Israel, opina, además que 'aprendemos hartas cosas acá y hacemos amigos, nos reímos jugando con los tíos (monitores), y todo para que los niños no estén solos'.
También resalta, que no todo son juegos, sino que asimismo, aprenden valores cristianos que dan a conocer los monitores.
'También nos enseñan a compartir, a ayudar al otro, ser solidarios', concluye Felipe.
Melanie Monserrat Rivera, del Colegio Integrado 'Eduardo Frei Montalva', es otra las niñas que participan en las colonias de verano y opina que 'esto me parece bueno porque aprendemos muchas cosas, nos divertimos, jugamos y por ejemplo están las postas, pero también nos enseñan a ser solidarios'.
Melanie recalca que estas actividades no las hacen normalmente en sus colegios y tampoco en sus casas, y además, pueden hacer nuevos amigos ya que 'los compañeros vienen de distintas escuelas'.
El coordinador Daniel Acevedo resume que el objetivo de estas colonias de verano es dar una mirada de Jesús a los niños, traspasando el servir a los demás y 'sacando a los niños de los sectores vulnerables para que se diviertan y hagan amigos'. J