l Debido a un accidente cardiovascular falleció este miércoles, en su domicilio, el director regional de la Aduana de Antofagasta, René Lobos Cofré.

Su velatorio se realizó en la Catedral de Antofagasta para luego ser trasladado ayer, a las 17:15 horas, a la Parroquia San Ignacio de Loyola de Arica, ubicada en calle Pablo Picasso 2715. Sus funerales se llevarán a acabo hoy a partir de las 13 horas con un responso fúnebre en la misma parroquia ariqueña y posteriormente, el cortejo se dirigirá hacia el Parque del Sendero, ubicado en el Valle de LLuta.

Rene Lobos nació en Punta Arenas y desarrolló una destacada carrera en Aduanas, tanto en esa región como en las de Talcahuano, Arica e Iquique. En su ciudad natal estudió Técnico en Comercio Exterior y en 1991 ingresó al Servicio, tras lo cual fue trasladado a Talcahuano y luego a Arica, donde se desempeñó en la jefatura del Subdepartamento de Drogas y participó en importantes procedimientos, como el caso del barco Nativa. Tras titularse como Ingeniero Comercial en Arica, asumió como jefe del Departamento de Fiscalización en Iquique.

Este año, en mayo asumió como director regional de la Aduana de Antofagasta. René Lobos era padre de 4 hijos: Alexander, sacerdote católico radicado en Arica; Héctor, biólogo marino; y los gemelos Sebastián y Sergio. J

La mayoría de los locatarios de la Feria del Juguete coincidieron en que las ventas estuvieron bien "reguleques". Ni siquiera en los días 23 y 24 pudieron repuntar, motivo por el cual responsabilizaron al municipio por otorgar permisos a personas que empaquetan regalos y también por la lejanía de la ubicación de la feria. "Me fue más o menos en las ventas, nos perjudicó la ubicación, porque la gente no viene aquí, está lejos; además el municipio dio permisos a los que envuelven regalos, quienes al final igual vendieron juguetes ropa y todo lo que tenían. Incluso nosotros pensamos que el 24 nos iba a ir bien , pero el flujo de gente igual fue muy poco", dijo Karen Rocha, del primer pasillo de la feria.

volver al parque

Después de la mala evaluación que hicieron los feriantes, recalcaron que desean volver al Parque Ibáñez. "Yo ayer conversé con mis socios y ellos manifestaron que no quieren estar nunca más aquí en el Morro, porque la evaluación de las ventas fue negativa. Por ejemplo, del 12 de diciembre hasta el 20 no hubo nada de público y a partir del día 21 hasta hoy se vendió algo y se pudo recuperar la inversión, pero no era lo que esperábamos. Ahora ya pasó la fiesta, pero al otro año queremos que nos den el Parque Ibáñez, porque ahí sí que nos va bien", aseguró Roxana Ramírez, de la Asociación San Marcos de Arica.

Otra de las locatarias que se vio afectada en sus ganancias fue María Gregorio, de la Asociación Fiestas Navideñas. "Las ventas no fueron muy buenas, los últimos 4 días recién se vio algo de público, pero en general las ventas no fueron muy buenas. Y aquí hay personas que trabajan una vez al año para mejorar sus ingresos, pero aquí no ganaron nada", explicó.

poca publicidad

Otra de las cosas que influyeron en las ventas fue la poca publicidad que se le hizo a la feria, según comentaron algunos feriantes. "Lo que también nos perjudicó bastante fue que a nosotros nos avisaron de la ubicación de la feria a pocos días de la inauguración y eso no nos dio tiempo para hacer publicidad", comentó María Gregorio. Espinoza.

"La municipalidad nos prometió poner el letrero a la Feria del Juguete y hacer algo de propaganda, pero nada se hizo hasta ahora. Y yo misma tenía que ir a las calles a informar de esta feria. Por eso sentimos que nos tiraron a un cementerio, no me quedó otra que ofertar todo para salvar algo", dijo Eva Espinoza. J