Justicia y libertad
Muchas veces se suele escuchar en el debate público que "hay que comenzar a establecer justicia social y dignidad a las personas", frases de épocas pretéritas que de una u otra forma reaparecen en la voz de jóvenes muy bien intencionados, sin duda, pero que con la fatal arrogancia de creer saber qué es lo mejor para las personas.
Lo cierto es que nadie puede decidir por otros y menos establecer cuáles serán los límites al fruto de su trabajo, esfuerzo y sacrificio. Nadie puede planificar nuestras aspiraciones como tampoco nuestra felicidad, por lo cual, para estos ilustres y jóvenes iluminados, la libertad es un problema, pues le da sentido a que cada persona pueda levantar sus propios proyectos, que el Estado no es el solucionador de problemas, que hay que crear riqueza y no redistribuirla.
¿La libertad un problema? No, al contrario la libertad es el mejor camino para lograr que cada uno pueda forjar su propio destino y felicidad.
Francisco Sánchez Urra