Ofrecen hasta un auto por encontrar a Charlie
A Charlie, el perrito Yorkshire de 7 meses de vida, lo recuerdan como alegre, juguetón y muy cariñoso. "Era la alegría de nuestro hogar", asegura Alexis Rivera, estudiante de Enfermería de la Universidad de Tarapacá, quien es uno de los tíos de la mascota extraviada que habitaba un hogar de 4 universitarios incluido un niño que hasta dejó de comer por no tener la compañía de su gran amigo.
La tragedia de estos jóvenes comenzó la tarde del 1 de noviembre cuando se encontraban almorzando en el sector de Llacolén con La Proveedora, en la población Raúl Silva Henríquez.
En un abrir y cerrar de ojos se dan cuenta que Charlie había desaparecido sin dejar rastro alguno.
"Salimos de inmediato y nos quedamos buscándolo toda la noche, hasta la madrugada. Parecía loco gritando. Al otro día seguimos la búsqueda y así hasta ahora. Hemos dejado los pies en la calle. Lo hemos buscado por todos lados", comenta Alexis Rivera.
recompenSa
La desesperación ha llegado hasta tal punto que decidieron dar su auto, un Mitsubishi Colt blanco año 2003, como recompensa.
"Preferimos despojarnos de lo material que se podrá recuperar en un futuro a cambio de volver a tener a nuestro Charlie en los brazos, espero nos puedan ayudar a recuperar a nuestro perrito. Ojalá que la persona que lo tenga quiera cambiar un auto por nuestro Charlie", agrega el estudiante de Enfermería.
Los jóvenes han empapelado distintos sectores de la ciudad para encontrar al Yorkshire. Sobre sus características dicen que se puede reconocer por lo delgado que está. El perro estaba por debajo de su peso y estaba en un tratamiento para que le diera más apetito.
"Charlie es flaco, de patas largas, siempre anda con las orejas paradas. Tiene la cabeza como con visos dorados y platinados y el lomo negro. Las patitas son doradas. Es chico, debe medir entre 20 y 30 centímetros. Es muy sociable. Jamás va a morder a nadie", destaca Alexis.
Estafados
Además del mal rato que significa para los estudiantes haber perdido a su mascota regalona, los jóvenes tuvieron que afrontar una estafa de por medio de un antisocial que los llamó para decirles que sabía quiénes tenían al pequeño Charlie a cambio de 50 mil pesos.
"La verdad es que fui muy inocente. Lo pasamos a buscar y me dice dónde supuestamente tenían a Charlie, le pasé el dinero y desapareció. Ha sido un proceso muy difícil porque hemos recibido bastantes llamadas falsas".
Por esta razón es que decidieron aumentar la recompensa para que si alguien tiene a Charlie se apiade y quiera cambiarlo por el auto.
Los números que dejan los dueños de la mascota extraviada son el 72939250 y el 94703968 para que se comuniquen con ellos si tienen pistas verdaderas del paradero de Charlie, el perrito que formaba parte de su familia. J