Gracias a una investigación que venía desarrollándose desde hace bastante tiempo en base a escuchas telefónicas y seguimientos, la Brigada Antinarcóticos de la Policía de Investigaciones (PDI) de Arica logró desbaratar la acción de una banda dedicada al ingreso, acopio y distribución de drogas de alta pureza.
Tras la certeza de cómo actuaban estos sujetos y en un exitoso operativo, fueron detenidos tres ciudadanos bolivianos y un chileno.
Todos ellos fueron formalizados ayer en el Tribunal de Garantía de Arica por el fiscal Elías Gutiérrez, por el delito de tráfico ilegal de drogas con el agravante de probar que actuaban como una banda organizada y asociación ilícita.
De acuerdo a lo expuesto por el fiscal en la audiencia de control de detención, las escuchas telefónicas permitieron hacer un eficaz seguimiento a los imputados Mario Marcos Solarez Taza, Roberto Carlos Yampara Mamani, Mateo Eusebio Blanco Cáceres y Eleuterio Mamani Cruz, quienes buscaban comercializar en forma ilícita la droga en nuestro país.
Las pesquisas claves de los sabuesos policiales apuntaron a precisar que los sujetos tenían guardada la droga en un sector del kilómetro 35 del Valle de Azapa.
Cuando éstos fueron a buscarla y regresaron a la ciudad en un auto Mazda blanco es que la pista condujo a los policías hasta un domicilio de calle Tambo Quemado, detrás del Terminal del Agro.
Con las correspondientes autorizaciones, fue allanada la casa donde se halló oculta la droga, junto a balanzas y bolsas de plástico para la dosificación.
Junto con ello, la otra línea de investigación se dirigió hacia el supuesto financista de la organización, que se alojaba en una residencial de la ciudad.
Hasta el lugar de alojamiento, también llegó el brazo de la ley, descubriendo en la pieza y debajo del colchón, 3.000 dólares americanos, y más de un millón de pesos chilenos.
Con todo el puzzle armado es que los detenidos pasaron ayer a control de detención, solicitando el fiscal la medida cautelar de prisión preventiva para los cuatro imputados.
No obstante, la defensora Paola Navarrete se opuso a la medida, en especial sobre el imputado detenido en la residencial.
Según alegó en la audiencia, el sujeto se dedica a la compra de vehículos y el dinero en su pieza, tendría ese fin.
Sin embargo, la jueza Sara Pizarro, desestimó tal argumento y acogió la medida cautelar dado el peligro que representan los sujetos para la seguridad de la sociedad. J