La Secretaría Regional Ministerial de Obras Públicas anunció que su cartera estudia realizar una importante ampliación del Aeropuerto Chacalluta, esto dado el sostenido aumento de pasajeros que llegan hasta este terminal aéreo, ubicado a 18,5 kilómetros de la ciudad.

Según la Seremi, el próximo año se iniciará la licitación de un estudio que permita definir el proyecto, el que debería extenderse no más allá del 2017.

El recinto cuenta actualmente con una superficie de 5.200 metros cuadrados y, según las primeras estimaciones, éste debería crecer al doble, sobre todo considerando que la actual concesión se extingue el año 2019, por lo que se hace necesario pensar en una estructura que responda a la demanda de las próximas décadas.

En efecto, las estadísticas indican que en los últimos ocho años el tránsito de pasajeros nacionales aumentó en 15 por ciento, mientras que el de extranjeros lo hizo en un 3 por ciento.

Otro aspecto a considerar es el cada vez más alto número de personas que abordan vuelos internacionales en la región. Las cifras indican que estas pasaron de 5.581 en 2008 a 15.624 durante el 2013; esto dado las rutas que se han establecido con los aeropuertos de La Paz (Bolivia) y de Arequipa (Perú).

En este ámbito, el mayor incremento corresponde a ciudadanos bolivianos que visitan la zona con fines turísticos; mientras que -los menos- arriban en plan de negocios o en busca de inversiones.

Todo indica que durante los próximos años esta tendencia irá al alza, sobre todo cuando se espera el despegue definitivo de actividades económicas tan demandantes como el turismo y la minería.

Mientras estas industrias continúan su proceso de desarrollo, la tendencia muestra que para el año 2030 el edificio del terminal aéreo recibirá cerca de 100 mil personas al mes, lo que necesariamente involucra una mejora sustancial en infraestructura y servicio.

No cabe duda que se trata de una mirada hacia futuro, la que también podría replicarse en los maltrechos terminales de buses.