Aveces, de las historias más tristes pueden sacarse las ganas de salir adelante. Como un símbolo de esperanza se mantiene hasta hoy una pequeña plaza en el sector de Toesca con Quillay.

Erika Castillo está hace años viviendo en el lugar, y comenta la historia de la pequeña y frondosa plaza que se mantiene frente a su casa.

"La plaza empezó hace varios años. Antes los vecinos la cuidaban, pero ahora la municipalidad la viene a regar. Vienen hartos niños a jugar y está muy bonita", comenta Érika.

Sin embargo, no siempre fue así. Hoy el sector tiene una banca y el resto son plantas de todo tipo. Hace muchos años, tenía juegos infantiles.

"Pero estaban mal puestos. Un niñito se subió a un columpio y el juego se le cayó encima. Tenía como 6 años y después de varios días, se murió. Fue algo muy triste", comenta.

Jorge Arispe lleva viviendo junto a la plaza 26 años y conoce muy bien la historia.

"Esto antes eran puras piedras. Los mismos vecinos pusimos árboles, pero un ventarrón botó todo y sólo nos dejó una palmera. Luego, cada vecino aportó con plantas y regábamos con baldes", recuerda.

"Pablo Moraga era un niño de la población, vecino mío. La municipalidad de ese entonces puso juegos infantiles, y los niños se impacientaron y se subieron antes de que estuvieran listas. Él estuvo mal varios días, y ahora la plaza se llama "Pablito". Nadie la conoce de otra manera", asegura Jorge.

"Cuando uno tienen una planta que crece muy grande, la pone en la plaza. Y aunque ya no tenemos que regar, sí la cuidamos mucho. Ahora yo creo que es una de las plazas más lindas de Arica", expresó el vecino. J