Volvía de vacaciones de Santa Cruz, Bolivia, cuando el sábado llegamos a la frontera después de la hora de paso, por lo tanto no pudimos cruzar. Por la altura y frío, mi hija no podía dormir, tenía sus labios morados y respiraba con mucha dificultad. Cerca de las 9.40 de la noche bajé rápido a la PDI o SAG y ni siquiera me abrieron. Una persona como que se molestó y de mala manera me atendió y dijo "ya está cerrada la frontera". Pregunté si tiene algún botiquín o pastilla para mi hija que está muy mal y me dijo "No". Corrí al frente, donde Carabineros y les comenté lo mismo. Tampoco había botiquín...pero los carabineros me ayudaron, llevándonos a mi hija y a mí a Putre. Ahí el médico dijo "si no la traes se muere de edema pulmonar". ¿Por qué no hay alguna urgencia en ese lugar o por último algún botiquín?

Que vergüenza.

Andrea Villalobos

La Corte Internacional de Justicia estableció los criterios para que Chile y Perú acuerde los límites definitivos de sus respectivas Zonas Económicas Exclusivas… el debate se ha centrado en hitos fronterizos y cabe señalar que lo más importante que ambos países debieran concordar es la forma de preservar el recurso pesquero.

Los peces no van a La Haya ni se preocupan por faros ni banderas. Hasta el momento, Chile y Perú no han concordado una política común de manejo (periodos de veda, tamaños mínimos de captura, tonelaje de extracción) de un recurso que se reproduce, crece y se mueve en la zona limítrofe y la falta de esta política común va en detrimento del recurso.

Si los pescadores de ambos países quedaron disconformes con el fallo de La Haya, una de las mejores formas de asegurarles su fuente laboral en el largo plazo es cuidando el recurso sobre bases científicas, fuera de nacionalismos. La ciudadanía debe exigir un acuerdo pesquero binacional, que representa la mejor defensa futura de su riqueza .

Sergio Giaconi