Empresario fue asaltado junto a su hijo en 2012, cuando le quitaron su Hyundai. Ayer la PDI lo encontró en Rómulo Peña.
La historia se remonta a mayo de 2012, en la esquina de Alameda con Las Rejas, de la capital. En esa fecha y mientras un joven empresario transitaba arriba de su jeep Hyundai Tucson con su hijo de menos de un año, dos encapuchados los encañonaron para sustraerle las llaves y robarle el 4x4.
Pero como el hombre nunca se dio por vencido y estampó la denuncia en la PDI, tras una investigación que llegó hasta Arica, personal del Grupo Gebro notó que algo raro había en un vehículo de las mismas características estacionado varios días en la esquina de Rómulo Peña con calle Risopatrón, donde luego de las diligencias de rigor, descubrieron que era el mismo que había sido sustraído en la capital.
Como son las cosas, tras las diligencias de rigor, los policías ingresaron a la casa del actual "propietario" del 4x4, donde encontraron cocaína base y marihuana prensada listas para vender, por lo que detuvieron a Manuel A.A.R. (31) por el delito de receptación, aunque tras su formalización quedó sólo con medidas cautelares. "Esta diligencia se gesta por el Grupo Gebro con cooperación de nuestra unidad, donde hoy (ayer) se logró la detención del sujeto que mantenía en su poder el vehículo con encargo por robo desde 2012, por lo que al ingreso a su domicilio, además se pudo incautar droga y otros elementos para dosificarla", explicó el comisario Claudio Aburto, jefe de la Brigada de Robos de la PDI (Biro), quien agregó que el avalúo del móvil es de 13 millones de pesos y llamó a denunciar cualquier tipo de robo, como el ocurrido en Santiago, donde incluso tras meses se logró recuperar un vehículo que se daba por perdido.
La diligencia del Grupo Gebro se suma a otra realizada en menos de una semana, donde se logró la detención un hombre de 33 años y su polola de 22 (ambos con extenso historial policial), quienes con dos mochilas cargadas con celulares robados y herramientas llegaban hasta el Terminal Internacional de Diego Portales para vender la mercadería a ciudadanos peruanos a un tentador precio. J